Detenido el Rambo Gallego tras once meses de fuga por los bosques

Sánchez Chacón, un exmilitar de 63 años, asesino convicto y experto en supervivencia, habría vivido escondido todo este tiempo en la comarca de Eume gracias a pequeños robos a los vecinos y la caza de pequeños animales, según fuentes de la investigación, que siempre le situaron en esta zona boscosa de la provincia de A Coruña, escondido en los montes cercanos a Ferrol.

La captura del Rambo Gallego, se produjo a las 00:33 horas cuando unos vecinos se percataron de que un individuo estaba tratando de forzar la vivienda de su madre. De inmediato llamaron a un amigo que vivía en las cercanías, un guardia civil del puesto de San Sadurniño. El agente, fuera de servicio, acudió al lugar pero no encontró al sospechoso. El guardia, no obstante, se agazapó para ver si observaba algún movimiento en los alrededores. Tras un rato de espera observó cómo el Rambo Gallego salía de la la maleza portando una mochila a su espalda.

En ese momento se entabló una persecución, que incluyó disparos de advertencia por parte del funcionario, que finalmente logró atrapar a Sánchez, que había resultado herido en una pierna durante la huida.

La Guardia Civil no tenía dudas de que Rambo se movía en esa comarca. En los últimos meses habían sido multitud las denuncias de vecinos sobre pequeños hurtos de comida y herramientas en Eume. El pasado 23 de diciembre un cazador le encontró acampado en un monte de esta comarca, pero el Rambo Gallego una vez más logró escabullirse.

Hace solo una semana otro vecino sorprendió al fugitivo en su garaje, pero Sánchez, una vez más se dio a la fuga y se refugió en unos bosques en los que ya se ocultó en 1996, cuando le buscaban por matar de un tiro a sangre fría en agosto de aquel año a un joven de 24 años en las fiestas de San Roque en Cuntis. Un asesinato a sangre fría, y ante una veintena de testigos.

Horas después de la detención Sánchez Chacón fue puesto a disposición de la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Ferrol, en funciones de guardia, que hizo efectivas las dos requisitorias de ingreso en prisión que pesaban sobre el arrestado, dictadas por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra y el Juzgado de lo Penal número 5 de Valencia, respectivamente.

El Rambo Gallego, antiguo miembro de Batallón de Operaciones Especiales de la Legión en la década de los 80, finalmente fue detenido pero en 1997 protagonizó una fuga de película de la cárcel de Vigo, descolgándose con una manta desde el muro de la prisión aprovechando una pelea de varios reclusos. Estuvo huido durante dos años, hasta que en 1999 fue apresado de nuevo. En 2001 se volvió a escapar, en este caso de la cárcel de Picassent (Valencia).

Por el asesinato del joven de las fiestas en 2001 la justicia le condenó a 17 años y medio de prisión a los que luego se han ido sumando otras penas menores que habían postergado su salida de prisión hasta dentro de tres años. En la sentencia sobre el asesinato de Cuntis el tribunal zanjó que el Rambo gallego era una persona con una carácter «marcadamente antisocial», pero sin atenuantes mentales que justificasen su actuación.