PP, Vox y Cs recurrirán al Supremo si se indulta a los líderes independentistas

La dirección del PP no dudó en interpretar las declaraciones del ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, como un gesto a los partidos secesionistas en plena negociación presupuestaria. «Si Sánchez no defiende los intereses de los españoles, si se le cae ya la careta, si revela el precio tan caro que paga por seguir en el poder –insinuó Pablo Casado cesiones–, estamos dispuestos a defender a España y lo haremos recurriendo al Tribunal Supremo».

Aunque el Gobierno está obligado a tramitar las solicitudes de indulto, los populares sí creen que el anuncio en sí mismo y la reforma pendiente de los delitos de rebelión y sedición son guiños a los socios de investidura que dan soporte a Sánchez en el Congreso. Censuró Casado futuras medidas de gracia y se refirió a la modificación del Código Penal como una «amnistía de facto, a la carta». Desde el Ejecutivo, sin embargo, consideraron «prematura» la respuesta de la oposición, y la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, enfatizó que el Ministerio de Justicia debe dar curso a todas las peticiones de presos que se registran. «El PP tiene que serenarse mucho. Está en una posición bastante irresponsable», censuró la número dos de Pedro Sánchez.

Las diferencias entre el Gobierno y el PP, lejos de enfriarse, se agudizan con el paso de los días. A las tensiones por la gestión de la pandemia en la Comunidad de Madrid y al malestar por que PSOE y Unidas Podemos hayan impulsado una comisión para investigar el 'caso Kitchen' se sumó hoy el desacuerdo con el planteamiento de Justicia. En este contexto, la posibilidad de desbloqueo del Consejo General del Poder Judicial pareció más lejana que nunca.

Casado no sólo elevó el tono por la posibilidad de que la revisión de las peticiones de los líderes independentistas concluya en indultos. También dio por hecho que el diálogo del Ejecutivo con EH Bildu ha derivado en un acercamiento de presos de ETA al País Vasco. «Es algo ya inmoral y espero que la legítima oposición que lidera el PP pueda pararlo, pero para ello –apeló a las fuerzas minoritarias– hay partidos de ámbito regionalista o nacionalista que deberían ser conscientes de lo que está pasando en España». Y eso que «pasa en España» es, a su juicio, una «degradación institucional».

A pesar de la gravedad en el pronunciamiento del líder del PP, los populares no contemplan apoyar la moción de censura de Vox, ni siquiera como gesto. Los números no dan y promoverla para abrir después las urnas es, a juicio de Casado, un «fraude de ley». Ahora debe resolver si el partido votará en contra o se abstendrá.

Mientras, tanto la formación de Abascal como Ciudadanos mostraron su oposición frontal a los indultos. Los liberales hablaron en el Senado de la «empatía interesada» del Gobierno con los independentistas. En la Cámara alta se debatía una propuesta del PP para recuperar el delito de convocatoria de referéndum ilegal. Y aunque también Sánchez lo propuso en campaña, la iniciativa decayó con el voto en contra del PSOE.