Las candidaturas a presidir tres salas del Supremo medirán los equilibrios de poder en el CGPJ

En la Sala Segunda (Penal), la más mediática por su competencia para investigar y juzgar a los cargos aforados, los magistrados que rivalizan por la presidencia serán la progresista Ana Ferrer y el moderado Andrés Martínez Arrieta. Uno de los dos sustituirá a Manuel Marchena, que deja el puesto el próximo 5 de diciembre tras dos mandatos y después de haber renunciado a repetir.

La presencia de Martínez Arrieta en la lista oficial conocida este martes llama la atención porque su jubilación forzosa al llegar a los 72 años (tiene ahora 69) se cumplirá en pleno mandato en caso de que salga victorioso. Por lo que algunas fuentes consultadas apuntan a que ha dado un paso al frente para impedir que Ferrer, histórica integrante de la Asociación Jueces y Juezas para la Democracia (JJPD), salga elegida.

Mismo cuadro se presenta en otra sala clave en el Supremo, la de Contencioso-Administrativo, responsable de supervisar la legalidad de las resoluciones del Consejo de Ministros y de la administración central, entre otras. Los magistrados Pilar Teso (progresista) y Pablo Lucas (moderado) se enfrentarán por la presidencia. Ambos llegaron a ser propuestos por los dos bloques del CGPJ para presidir el órgano de gobierno de los jueces, pero ante la falta de acuerdo finalmente se buscó un nombre de consenso, el de Isabel Perelló.

Lucas, al igual que Martínez Arrieta, está en la rampa de salida al tener ya 70 años, por lo que en caso de ser elegido tendría que dejar la presidencia a mediados del mandato.

En la Sala de lo Social se han presentado los magistrados Juan Molins y Concepción Ureste y en la Civil solo habrá un candidato: Ignacio Sancho. El Consejo ha avanzado en una nota que los siete aspirantes serán convocados próximamente para comparecer ante la Comisión de Calificación para presentar su programa. Posteriormente, será el Pleno del CGPJ quien vote las presidencias en una fecha aún sin determinar.