Argelia aplaza a última hora la visita de Albares «por motivos de agenda»

La visita, cuya fecha ahora se aplaza 'sine die', tenía por objetivo dar capertazo a la crisis diplomática abierta tras el histórico giro del Gobierno en su respaldo al plan de Marruecos para la autonomía de la excolonia española, que provocó un terremoto diplomático en marzo de 2022. Mientras en Rabat se congratulaban de la decisión de Pedro Sánchez y normalizaban las maltrechas relaciones entre ambos países, Argelia hizo trizas el Tratado de Amistad que tenía vigente con España desde 2002 y retiró a su embajador en Madrid, abriendo una crisis que golpeó especialmente al comercio y al suministro de gas.

Un año y medio después, y ya con el deshielo iniciado tras el regreso en diciembre del legado argelino a su puesto, Albares tenía previsto viajar hoy a Argel invitado por su homólogo para tratar de certificar el deshielo.

Haabían sido varios los motivos que propiciaron el acercamiento entre ambos países en los últimos meses. Además de la normalización de los cauces diplomáticos, el propio Attaf reveló que el discurso que Pedro Sánchez pronunció en septiembre ante la ONU, en el que matizó su postura respecto al Sáhara –pidió «una solución política mutuamente aceptable» por Rabat y Arge–, tuvo buena acogida en su país. «Lo que nos motivó a dar luz verde para evaluar las relaciones con España fue ese discurso, hubo un cambio de posición», reconoció.

Más tarde, en enero y con motivo de la Conferencia de Embajadores en Madrid, Sánchez volvió a destacar como una de las líneas estratégicas en política exterior su interés por seguir consolidando la relación con Argelia, al que calificó de «país amigo». También ha sido «muy apreciada» por Argelia la posición del presidente sobre el conflicto en Gaza, aún a costa de abrir otra crisis diplomática entre España e Israel. Ahora se abre un nuevo plazo para certificar la normalización en las relaciones con el país vecino.