Aldama declara que el PSOE se llevaba «parte» de las mordidas sin aportar prueba documental

De Aldama llegó a la sede judicial acompañado por su abogado José Antonio Choclán, cerebro del pacto con Anticorrupción, y, para sorpresa de los presentes, 'escoltado' por Dani Esteve, el controvertido líder de Desokupa (empresa dedicada a desalojos extrajudiciales), quien además condujo el vehículo de alta gama que les trasladó al alto tribunal. Fue el aperitivo de una comparecencia muy esperada, en tanto en cuanto estaba en juego la continuidad de su colaboración con la justicia, que abrió con su testimonio delator del pasado 21 de noviembre.

En este sentido, la defensa de Aldama entregó este lunes al juez como novedad una nota manuscrita por Koldo García, según señaló, en la que se incluyen presuntas adjudicaciones de obra pública bajo sospecha de amaño. El documento detalla una cantidad relativa a las comisiones por el proyecto, la localización del mismo (Huesca, Valladolid, Murcia y Ourense) y la empresa que, en teoría, iba a ser la adjudicataria o la responsable de realizar la obra a cambio del pago de mordidas.

«Es un documento que me facilita Koldo sobre las comisiones que se pueden dar y que están pactadas por esas empresas para su adjudicación. Hay algunas que él controlaba y otras que controlaban ellos porque podrían tener más gente como él. Las anotaciones son una garantía de que Koldo iba a cumplir», explicó De Aldama, según la transcripción de su interrogatorio a la que ha tenido acceso este periódico.

Tras ello, enumeró las siguientes empresas que presuntamente hicieron pagos en especie para conseguir adjudicaciones de obra pública: Levantina, Lantania, HCH, Azvi, OPR y Áridos, y estimó que Ábalos y García se pudieron llevar entre 3,5 y 4 millones de euros en comisiones, además de las recibidas por los contratos de las mascarillas. «Solo a Ábalos personalmente le di unos 170.000 euros. Tres entregas en El Viso (el barrio donde vive) y cuatro o cinco veces en el ministerio», detalló De Aldama. «¿Pero tiene resguardos o recibís?», cuestionó la defensa del exministro. «No», admitió el empresario ante el juez.

El grueso de su comparecencia se centró precisamente en reiterar que tanto José Luis Ábalos como Koldo García recibieron comisiones por la «pre-adjudicación» de determinadas obras viales y por la adjudicación de la compra de mascarillas en plena pandemia a Soluciones de Gestión, la mercantil para la que trabajó De Aldama (se llevó 5,5 millones por la mediación que, dijo al juez, fiscalizó ante Hacienda). Ello pese a que el propio Ministerio de Transportes, dirigido ahora por Óscar Puente, ha concluido en sendos informes internos que los contratos señalados por el investigado, tramitados por Adif (gestor de la infraestructura ferroviarias) y la Dirección General de Carreteras, no tuvieron irregularidad alguna.

Pero el comisionista, lejos de suavizar su testimonio, incidió además en que hubo una entrega en efectivo de 15.000 euros al actual secretario de Organización del PSOE Santos Cerdán en un bar enfrente de la sede del partido, en la madrileña calle Ferraz. «Es un tema que llevó Koldo y surge tras un desencuentro con Cerdán porque se había omitido la cuota vasca en la adjudicación a una empresa, Acciona, y por el que Koldo llega a decir que a lo mejor tenía que ir a Ferraz 'a partirle la cara a este electricista de mierda'», relató este lunes De Aldama, que añadió que Ábalos y Koldo siempre le pedían comisiones. Que en septiembre de 2021, tras quedarse sin efectivo, les dijo que si querían más que fuesen a la República Dominicana a recogerlo. Y que por eso mandaron a Joseba García, hermano de Koldo.

En este punto, el empresario reafirmó que, según le decían «continuamente» el ministro y su asesor, pudo haber financiación irregular del PSOE como destinatario del «1% o 1,5%» del total de las mordidas que habrían cobrado ambos, aunque este lunes no presentó ninguna prueba que avalara su versión pese al interés del juez en aclarar este asunto.

Al terminar el interrogatorio, tanto la Fiscalía como la acusación popular pidieron la adopción de medidas cautelares contra el compareciente: la retirada de pasaporte y comparecencias los 1 y 15 de cada mes ante la Secretaría de la Sala Segunda (Penal) del Supremo. Una solicitud que el magistrado aceptó para evitar que se sustraiga de la acción de la justicia y ser requerido cuantas veces se lo solicite. Este martes está prevista la declaración de Koldo García, que ha respaldado el testimonio exculpatorio que efectuó el jueves Ábalos, quien fuera su jefe.