Ábalos, un hombre leal en los momentos críticos

El presidente premia de esta manera la lealtad incontestable de Ábalos en momentos críticos, sobre todo en el puesto que ha venido compaginando el valenciado como secretario de Organización del PSOE, desde el que maneja el aparato y las organizaciones autonómicas del partido en el poder. Durante las negociaciones con Unidas Podemos y ERC, en la que fue uno de los protagonistas, se empleó a fondo para serenar los barones socialistas regionales en su desconfianza hacia los pactos para la investidura de Sánchez.

También mantuvo firmeza a la hora de reunir las piezas del puzle para consolidar los apoyos a Sánchez en el parlamento más fragmentado y con mayor número de partidos de la historia de la democracia. Sin embargo, pese a la imagen de hombre duro que se ha forjado, rivales y compañeros le definen como afable y llano en el trato a la hora de negociar.

Ábalos tendrá que afrontar, desde la trastienda del partido y desde el Consejo de Ministros, una legislatura compleja en el Congreso, como parte protagonista del primer gobierno de coalición desde que se reinstauró la democracia en España.

Desde su puesto de ministro deberá reorientar sus anteriore competencias a hacia el desarrollo de una movilidad sostenible, eficiente y segura, que incluso buscan plasmarla en una nueva Ley de Movilidad.

Entre sus principales retos, este hijo de un torero deberá la subida del precio de los alquileres y con el conflicto entre los taxistas y los VTC; y avanzar en el proceso de liberalización del sector ferroviario.