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cristian reino
Jueves, 29 de junio 2017, 12:27
La CUP ha lanzado esta mañana un serio aviso al bloque secesionista: si el referéndum sobre la independencia del 1 de octubre no acaba celebrándose por culpa de las deserciones internas en el frente soberanista, la formación anticapitalista reventará la legislatura.
La CUP tiene garantizado ... su apoyo al Gobierno de Carles Puigdemont hasta la celebración de la consulta soberanista. A partir de ahí, considera que tendrá las manos libres. El portavoz de la ejecutiva antisistema, Quim Arrufat, ha alimentado esta mañana la teoría de que en el seno del Ejecutivo catalán hay consejeros que no están comprometidos al 100% con la ruptura. No están exactamente alineados con la magnitud del 1-O, ha dicho Arrufat en La Xarxa, que es tanto como decir que la izquierda radical teme que en cuanto se acerquen las posibles inhabilitaciones, podría haber una fuerte división en el consejo de Gobierno de la Generalitat.
La CUP se fía del presidente de la Generalitat, pero no de todos sus consejeros. El enfrentamiento entre los consejeros del PDeCAT y los de ERC es soterrado desde hace meses y unos y otros se acusan de no estar haciendo todo lo necesario para que el 1 de octubre haya urnas en los colegios electorales. Tras el fiasco del concurso de las urnas, desde ERC y la CUP cargaron contra el PDeCAT. La exCDC descarga contra Oriol Junquueras. Y los anticapitalistas expresaron su "preocupación" por la falta de firmeza y determinación del Govern con el 1-O.
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