Aznar llama a «contrarrestar» el secesionismo catalán

En la clausura de la Asamblea General de la Asociación de Empresa Familiar de Castilla-La Mancha, Aznar ha defendido que estas políticas que nacen en Cataluña "deben ser contrarrestadas con otras a favor de los principios constitucionales y del Estado de Derecho".

"No es aceptable que quienes declaran abiertamente su voluntad de destruir la nación e insisten en la secesión utilicen como plataforma de sus pretensiones las mismas instituciones cuya legitimidad niegan", ha criticado, añadiendo que los que quieren "romper" España "forman parte de un sistema político que quieren destruir".

En su opinión, se están viviendo "conductas que quiebran el Estado de Derecho" que "se deben superar". "Hay que aplicar la lógica de la democracia que algunos ven provocadora. Los problemas que afectan al entorno institucional lastran el progreso, la competitividad y las posibilidades de nuestro país", ha sentenciado.

Por otra parte, Aznar ha abogado por impulsar la "conformación definitiva" de la UE. "Hay populistas que quieren eliminar Europa, y hay otros que dicen que la respuesta a esta crisis existencial tiene que ser más Europa. Pues yo digo que ni lo uno, ni lo otro. Lo primero sería una catástrofe, lo segundo, es imposible", ha espetado. "Son muchas las cosas que podemos hacer al respecto y este es el momento clave", ha considerado, añadiendo que además "hay que dar respuesta a los ataques permanentes a los valores de la UE y a su modo de convivencia", en referencia a la amenaza yihadista.

Reforma laboral

El expresidente no ha pasado por alto los asuntos económicos y ha asegurado que España necesita una "segunda vuelta de la reforma laboral", una reforma fiscal "integral" y "poner el crecimiento económico al servicio de la reducción del déficit público y la deuda pública, porque "el déficit público no crea empleo".

Aznar ha abogado por "una transformación estructural de su economía" y por retomar las reformas pendientes y, en este punto, ha resaltado que "desde hace cinco años no se ha hecho ninguna reforma porque políticamente no se puede hacer".

Ha destacado la necesidad de "una segunda vuelta de la reforma laboral", pues, según ha afirmado, aunque la próxima semana tendremos buenas noticias de empleo", ha dicho, en el contexto global, "los vientos de cola de los últimos años no van a soplar tan fuertes y eso hace necesario retomar una agenda reformista todavía incompleta".

En cuanto a la reforma fiscal, ha justificado su necesidad en que "tenemos los tipos impositivos de los más altos de Europa y estamos a la cola en recaudación".