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cristian reino / efe
Domingo, 10 de julio 2016, 12:13
La nueva Convergència ya tiene nombre, después de tres días de congreso y un motín de la militancia, que rechazó las propuestas nominales que hizo la dirección. Las bases han decidido esta mañana que la nueva CDC pase a denominarse Partit Demòcrata Catalá ( ... PDC). Esta opción se ha impuesto por 871 votos a 657 a Partit Nacional Català (PNC). La tercera en liza, Junts per Catalunya, ha quedado descartada antes de pasar a la final. La militancia ha recibido con júbilo la decisión y con gritos a favor de la independencia.
Euforia convergente, tras días en los que la refundación del partido parecía que encallaba en sus inicios. La militancia ha vuelto a sublevarse a la dirección de la antigua CDC, que en un primer momento propuso Més Catalunya y Convergents de Catalunya y que esta mañana se ha decantado por Junts per Catalunya y en la final ha apostado por PNC. Es decir, la opción buena siempre ha sido la que no quería la ejecutiva.
PDC toma como referencia al Partido Demócrata estadounidense, a pesar de que a CDC siempre se la ha situado en el arco ideológico del centro derecha. Demòcratas puede nacer con polémica, ya que la formación Demòcrates de Catalunya, partido que surgió como escisión de Unió y que está integrado en Junts pel Sí junto a CDC y ERC, podría denunciar a los convergentes por plagio.
PDC nace como una formación netamente independentista, que aspira a convertir Cataluña en una república. El nuevo partido estará presidido por Artur Mas, que formará tándem en la cúpula con Neus Munté. La dirección ejecutiva estará formada por 12 personas, que se elegirán el 23 de julio.
Nuevo partido con objetivo soberanista
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha hecho este domingo un llamamiento para poner el recién creado Partit Demòcrata Català, la Convergència refundada, "a disposición" del Govern, del Parlament y de la sociedad catalana para llevar a cabo el compromiso "insobornable" de la independencia.
En la clausura del congreso fundacional del Partit Demòcrata Català, Puigdemont ha contrastado la "radicalidad democrática" del catalanismo con la "cultura política" española, donde "se abusa del poder" y los recursos públicos "son puestos al servicio de un combate ilícito contra las ideas de los otros".
En primera fila, como invitados a la clausura del congreso, se encontraban representantes de las distintas formaciones del arco parlamentario catalán, como Lluís Salvadó (ERC), Miquel Iceta (PSC), Josep Vendrell (Catalunya Sí que es Pot), Santi Rodríguez (PPC), además de Antoni Castellà y Titón Laïlla, de Demòcrates de Catalunya, que en las últimas horas han expresado su malestar por la elección del nombre de Partit Demòcrata Català.
En su alocución, Puigdemont ha señalado que él es "el presidente de la Generalitat escogido por un Parlament que ha recibido el encargo de los ciudadanos de encaminar Cataluña hacia la independencia de una determinada manera, con unos valores y unas reglas del juego y con unos compromisos insobornables, con voluntad de transversalidad y de integración".
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