Sánchez ve «un paso más cerca» un Gobierno de cambio tras reunirse con Iglesias

El líder del PSOE ha subrayado que lo sustantivo de la reunión es que el secretario general del Podemos ha levantado el veto a hablar con Ciudadanos, y ha abierto la puerta a un acuerdo entre los tres partidos. Lo que no quiere decir, ha precisado, que vaya a haber un Gobierno tripartito. Más bien se ha inclinado por un Ejecutivo formado por dos partidos, uno siempre sería el PSOE, y el otro, bien sea Podemos bien sea Ciudadanos, apoyaría desde el Parlamento.

Sánchez ha señalado que su propuesta para gobernar no es la vía del 161, defendida por Iglesias con los votos del PSOE, Podemos, Compromís e IU en el Congreso; ni la vía del 131, que es la que suman socialistas y Ciudadanos; nuestra propuesta es la vía del 199, es decir PSOE, Podemos, Compromís y Ciudadanos. El secretario general ha insistido que la presencia del partido de Albert Rivera en un acuerdo es innegociable. Soy un hombre de palabra, y todo acuerdo debe respetar el acuerdo que tenemos con Ciudadanos. Ha insistido en este punto ante los planteamientos de Iglesias, que excluyen al partido de Rivera del acuerdo final, aunque no de las conversaciones.

El líder socialista, además, ha dado además escaso valor al gesto del secretario general de Podemos de retirar su exigencia de ser vicepresidente del Gobierno de coalición con los socialistas. Él se propuso solo, él se excluye solo. Es su responsabilidad, ha zanjado aunque ha acotado que Iglesias se dio cuenta de que cometió un error y lo ha corregido porque aquellas palabras produjeron rechazo en el PSOE y al propio Sánchez, según confesó.

El líder socialista, en definitiva, ha mostrado tras la reunión con su homólogo de Podemos un optimismo moderado con mucha cautela porque no va a ser fácil, pero por primera vez es factible alcanzar un acuerdo a tres bandas para que se produzca un relevo en la Moncloa sin necesidad de convocar nuevas elecciones el 26 de junio.