El juez Castro pide a la Audiencia Nacional datos sobre Granados y la operación Púnica

El magistrado balear sospecha que el partido regional pagara parte de la sede de Génova con dinero del caso Son Espases, en el que se investiga un presunto amaño en la adjudicación de la construcción del hospital de Palma por un presupuesto inicial de 780 millones de euros, la mayor obra pública jamás emprendida en el archipiélago.

Castro cree que ese mega concurso fallido llevó aparejado el pago de comisiones a los populares baleares que terminaron en manos del partido en Madrid en forma de trabajos para la reforma de la sede de la formación en el número 13 de la calle Génova de la capital de España. Una hipótesis que se estaría confirmando con los últimos avances de la operación Púnica con el registro de despachos de la constructora OHL, a la que iba a ser adjudicada la faraónica obra.

Jaume Matas, según diversas fuentes, intenta llegar a un acuerdo con la Fiscalía para confesar que la licitación adjudicada a OHL fue una «orden directa de Madrid». Es más, el expresidente estaría dispuesto a dar nombres y apellidos de altos responsables populares involucrados en la financiación irregular del PP de Madrid. La decisión de Castro de investigar las cuentas del PP viene también provocada por la confesión en esta causa del ex concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma Javier Rodrigo de Santos, quien aseguró que el Gobierno de Matas exigió hasta nueve millones de euros por la adjudicación del hospital. Según De Santos, el Ejecutivo autonómico, con la aquiescencia del PP nacional, solía reclamar mordidas del 3% del importe de las obras.

El pasado 29 de julio, Castro ya imputó en el caso Son Espases a Matas junto a otras siete personas, entre ellas el presidente de OHL, Juan Miguel Villar Mir, por prevaricación continuada, falsedad documental y fraude a la administración pública en la adjudicación del complejo sanitario.