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Ander Azpiroz
Jueves, 3 de diciembre 2015, 19:32
"Señoras y señores, les habla el capitán". Con estas palabras y micrófono en mano ha dado Pablo Iglesias el pistoletazo de salida a la caravana electoral, que a lo largo de los próximos 15 días seguirá al candidato a lo largo de la geografía ... española.
La primera parada del autobús morado -tuneado con el color y lema de Podemos- es Villaralbo, un pequeño municipio de Zamora de 2.000 habitantes. Este lugar ha sido elegido para la tradicional pega de carteles por dos motivos. El primero de ellos es estratégico. Con este gesto Podemos quiere hacer un guiño al electorado rural, más reacio que el urbanita a dar carpetazo al bipartidismo. El segundo motivo de Villaralbo es sentimental. Iglesias ha querido iniciar la campaña junto a su padre, residente en Zamora.
Villaralbo es la primera etapa de una larga carrera en la que, ha dicho el capitán Iglesias, "nos aguarda una travesía agitada en la que nos esperan turbulencias políticas. Despegamos hacia el asalto a los cielos".
Un poema
El primer acto ha sido cenar con representantes del sector agrario. También con su padre, que ha emocionado al candidato cuando le ha recitado en alto el poema de León Felipe 'Pie para El Niño de Vallecas'
Tras la cena, el candidato se ha dirigido acompañado de un centenar de simpatizantes a la plaza del pueblo para pegar su primer cartel junto a su padre e Íñigo Errejón. Allí, se ha referido al rifirrafe que ha mantenido con la popular Celia Villalobos. En la discusión, ha dicho, se distinguió el tono de la vieja política que encarna el PP y el de la nueva política que representa Podemos y gobernará España a partir del 20 diciembre.
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