Rosario Porto niega que diera orfidal a Asunta: «Yo no maté a mi hija»

Durante el interrogatorio del fiscal, que se ha alargado hasta cinco horas, Porto ha reconocido que tomaba Orfidal para dormir tras haber estado ingresada hace dos años por una depresión, pero ha negado que suministrara este ansiolítico a la menor. "En mi vida he dado un orfidal a la niña", ha señalado antes de añadir que tampoco el padre le daba esta medicación. "Alfonso no le daba orfidal a su hija, no tiene ningún sentido", ha añadido.

Aunque Porto ha señalado que él pudo tener "ocasión" de hacerlo cuando ella fue al baño, ha explicado que si su exmarido le hubiera dado este medicamento a la pequeña el día que murió ella hubiera "notado los efectos" en la comida que compartieron los tres.

La abogada gallega se ha mostrado disconforme con el representante del Ministerio Fiscal, al que ha llegado a preguntar si tiene hijos para tratar de hacerle entender cómo se sintió ella en los momentos posteriores al hallazgo del cadáver, y ha llegado a levantar la voz en varias ocasiones, tras lo que ha pedido disculpas a "sus señorías". En concreto, en el análisis de las distintas fotografías de las cuerdas por parte de los miembros del jurado, la acusada ha señalado que "compañeras presas" de la cárcel de Teixeiro en la que se encuentra desde hace dos años y que "vienen del rural" le han indicado que "Galicia está llena de cuerdas como esta".

Durante el interrogatorio Porto ha confesado que la ruptura con su marido fue difícil, porque la relación no funcionaba pero, aún así, ella era más partidaria de ponerle fin que él, que "al principio no reaccionó bien". Ha contado también que tras su último ingreso, ha explicado que llegó a un "acuerdo" con su exmarido para que le ayudara a cuidar a Asunta y que como contraprestación ella rompió con su entonces amante. "Como padres, hicimos lo mejor que pudimos", ha dicho.

El extraño hombre de negro

También ha declarado durante el interrogatorio que en julio de ese año un hombre entró en su casa de madrugada cuando estaba sola con la niña y que atacó a la menor, pero que no denunció los hechos ante la Policía para no traumatizarla. "Estábamos en casa y sobre las tres o cuatro de la madrugada oigo gritar a la niña desde su habitación", ha explicado Rosario Porto que ha relatado cómo alguien entró porque las llaves estaban puestas en la puerta y cogió a Asunta de la "cintura o el cuello" y cómo ella se avalanzó sobre el desconocido. "No sé de dónde saqué fuerza, me tiré encima y la soltó", ha detallado ante el jurado.

Rosario Porto ha explicado que después fue con su hija a la cocina para coger un cuchillo y "solventar" el asunto, pero que la supuesto atacante ya había huido. Según el sumario el caso, esta fue una de las ocasiones en las que presuntamente Rosario Porto y Alfonso Basterra intentaron matar a Asunta. Tras este incidente Asunta mandó un whatsapp a una amiga con el siguiente mensaje: "Estoy nerviosa, hoy me han intentado matar. No hables del tema con nadie".

«Alfonso me pegó en alguna ocasión»

La madre de la niña ha aguantado el incisivo interrogatorio del fiscal Jorge Fernández de Aránguiz y ha respondido a todas las preguntas. "¿Alfonso le ha pegado?", le espetó el acusador nada más intervenir. "¿Qué tiene que ver eso con el juicio?", respondió ella. "En alguna ocasión, él es más fuerte que yo", asintió tras la insistencia del fiscal. "Déjelo, le ha dicho que en alguna ocasión", intervino el presidente del tribunal.

Vestida negro, como en la jornada anterior, Porto ha sido la primera de los dos acusados por la muerte de la niña en prestar declaración. Mañana lo hará Alfonso Basterra, al que el fiscal atribuye "un plan" con su exmujer para acabar con la vida de su hija adoptiva.