Chaves y Zarrías presentan ante el Congreso el escrito de renuncia a su acta de diputados

La marcha del expresidente y el ex consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía había sido ya anunciada por el secretario de Organización del partido, César Luena, el mismo día en el que el magistrado hizo pública su intención de mantenerlos en la causa como imputados. Era lo que tanto Pedro Sánchez como Susana Díaz se habían comprometido a exigirles si llegaba ese momento. Sin embargo, el hecho de que ellos no presentaran el escrito de renuncia de manera inmediata y la sorpresa de que el tercer afectado en discordia, el exconsejero de Empleo José Antonio Viera, optara por aferrarse al cargo, al precio de abandonar el PSOE y pasarse al grupo mixto, dio lugar a especulaciones sobre cuál seria su posición final.

Ambos habían dejado clara su intención de plantear alegaciones ante la sala de admisión contra la decisión del juez y fuentes de su entorno defendían que cabría esperar a que ese asunto estuviera resuelto antes de formalizar su cese. La dirección del PSOE, sin embargo, dejó claro el mismo viernes a este medio que no pasaría esta semana sin que Chaves y el que durante tantos años fuera su número dos abandonaran el Congreso y no mostró ninguna intranquilidad al respecto.

A Viera, mientras, se le ha apartado del grupo socialista (porque él no había presentado su baja voluntaria). Y el secretario general del partido, Pedro Sánchez, ha asegurado en una entrevista en la Sexta sentirse "avergonzado" por su comportamiento y ha pedido disculpas a los españoles dado que se presentó a las elecciones en las listas de su formación.

En todo caso, algunas fuentes creen que la 'rebeldía' del exconsejero andaluz de Empleo, que justificó su negativa a entregar el acta en la defensa de sus "intereses personales", puede beneficiar a Chaves y Zarrías. Viera temía (como los demás) caer en manos de la juez Mercedes Alaya si perdía el fuero como diputado porque esta ya ha tomado medidas drásticas como enviar a prisión preventiva a su sucesor, Antonio Fernández, tras tomarle declaración. Pero si él sigue siendo aforado y, por lo tanto sólo puede ser juzgado por el Supremo, el juez Barreiro podría decidir mantener la causa contra Chaves y Zarrías alegando conexión de los delitos que se les imputan a todos ellos, algo que ya hizo con José Antonio Griñán, que también dejó de tener protección especial al dejar el acta de senador.