Gabilondo afronta el «desafío» y espera la respuesta de los militantes

Gabilondo, que no es militante del PSOE, ha asegurado poco antes de participar en un desayuno en el que actuaba como presentador del consejero delegado de la cadena Cope, Fernando Jiménez Barriocanal, que tampoco es "indiferente" a las tribulaciones del primer partido de la oposición y que escucha a quienes "dentro y fuera" le miran como un referente.

"Yo no quiero adhesiones inquebrantables -ha dicho-. Lo que quiero son decisiones adoptadas por los militantes". De este modo, facilita a Ferraz la tarea de que su nombre salga a la palestra en las asambleas que desde mañana hasta el viernes celebrarán los militantes para proponer candidaturas a la comisión gestora y que esta tome una decisión.

En algunos círculos del PSOE se había anticipado que Gabilondo huiría de todo lo que suene a conflicto. Y en el entorno más próximo al defenestrado Tomás Gómez se confiaba en que la decisión de Pedro Zerolo y de Amparo Valcarce, ambos afines al ex secretario regional y al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapaterro, de mostrar su disposición a ser candidatos le disuadirían. Pero no ha sido así.

En lo que sí ha insistido es en que tampoco quiere interferir en el proceso interno o, dicho de otro modo, que no quiere ser una imposición de nadie. Fuentes del PSM, críticas con Gómez, aseguran que no lo será porque es un hombre que "entra muy bien" en las bases y que en muchas agrupaciones ya lo defienden como la mejor opción.

Él respeta las formas. Esperará a que termine el proceso y después tomará una decisión que ha prometido que será "rápida y responsable".