CRISTIAN REINO
Viernes, 31 de octubre 2014, 11:51
A poco más de una semana para el 9-N, el Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat ha hecho público un sondeo que concluye que el 49% de los catalanes son partidarios de votar sí al Estado propio y sí al Estado independiente, ... según el formato del proceso participativo que impulsa el Gobierno catalán.
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El 49%, que es dos puntos superior al anterior barómetro (abril) sale como resultado de que el 64% votaría sí a la primera pregunta (Estado propio) y el 76% lo haría también de manera positiva en la segunda, la que cuestiona sobre si quiere que ese Estado se convierta en independiente. La opción intermedia (sí-no) obtendría el 12% de los votos y el no a todo, el 19%. Las cifras son, en cualquier caso, sobre el 100% de encuestados y, según el CEO, si se cocinara superaría de largo el 50% y se situaría en el 53-55%.
El barómetro del CEO, elaborado entre septiembre y octubre, después del 11-S, después de que Artur Mas firmara el decreto de convocatoria de la consulta y después también de que el Gobierno la impugnara y el Constitucional la suspendiera, aunque antes de que Mas impulsara el nuevo formato, señala además que el 48% de los catalanes no se sienten independentistas frente al 49% que sí se consideran secesionistas. Entre estos últimos, poco menos de la mitad se han hecho independentistas en los últimos dos años, sobre todo por la actitud y los comentarios del Gobierno central hacia Cataluña. El CEO estima que unos 400 catalanes se hacen independentistas cada día y que medio millón han dado el giro secesionista en los últimos dos años. El 45% de los catalanes creen que Cataluña debería ser un Estado independiente, el 22% un Estado dentro de una España federal y el 23%, una comunidad autónoma.
Respecto a la estimación sobre si hoy se celebrasen elecciones, Esquerra sigue su ascenso y obtendría el 21% de los votos, que darían 38-30 escaños (ahora tiene 21), CiU sacaría el 13,8% de los votos (32-33 escaños, frente a los 50 actuales) y PSC, CUP y Podemos se disputarían la tercera plaza en intención directa de votos, aunque en la traslación a escaños los socialistas tendrían 14-16 diputados, la formación de Pablo Iglesias 10-11 y CUP 8-9. El PP, con el 2,2% de intención directa de votos arrancaría 11-13 parlamentarios. Según el CEO, la irrupción de Podemos se basa en votos procedentes de la abstención, del PSC y de ICV.
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