La viuda del último asesinado por los GAL aprieta al único imputado

El cara a cara duró una hora y se celebró en el Juzgado Central de Instrucción número cinco, cuyo titular es Pablo Ruz. Para la viuda , que lleva luchando todos estos años para dar luz al caso con la ayuda del Colectivo de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco, Covite, la diligencia ha sido satisfactoria porque «ha dejado en evidencia varias de las contradicciones» del acusado, por lo que el fiscal del caso, Pedro Rubira, le permitió seguir aportando pruebas a la causa, autorizando así que la investigación por el último asesinato de los GAL «continúe abierta».

A su salida del juzgado, Martín aseguró que ha quedado probado el vínculo familiar del imputado, fotógrafo de profesión en Hendaya (Francia), con un agente de la Guardia Civil que trabajaba en el País Vasco cuando sucedió el asesinato. Una extremo que podría llevar hasta el miembro o miembros del Grupo Antiterrorista de Liberación que tirotearon a García Goena, un objetor de conciencia que vivía en Hendaya para evitar el servicio militar y que fue confundido con un etarra.

En febrero pasado, el juez Ruz tomó declaración como testigo al expolicía José Amedo, que afirmó que el exdirector general de la Seguridad del Estado, Julián Sancristóbal, podría estar relacionado con este asesinato. Amedo, al que se atribuía la autoría material de la muerte junto al también policía Michel Domínguez, fue absuelto tras un juicio celebrado en 1991. El magistrado interrogó al que fuera subcomisario sobre el contenido de su último libro 'Cal Viva', en el que se refiere al asesinato y lo relaciona con una persona que identificaba como 'Patxi'.

Precisamente, la viuda del García Goena aseguró que acudió en varias ocasiones junto a su marido y su hija al estudio Photo Galaxie de Hendaya, regentado por un fotógrafo con este nombre.