Sortu dice que el proceso de paz sigue adelante tras verse con los mediadores

En un comunicado, Sortu ha señalado que los mediadores han ofrecido durante la reunión "una lectura general de la situación del proceso de resolución", así como "de la posición de los partidos y de los gobiernos".

La formación abertzale ha reiterado su "total disposición para llevar hasta el último término el proceso de paz y de normalización política" y anuncia que "trabajará sin descanso hasta obtenerlo".

Para ello, considera que "el trabajo de los mediadores internacionales es fundamental", así como "abrir un proceso de diálogo entre partidos sin condiciones, con el objetivo de llegar a acuerdos".

"Por encima de todos los obstáculos, el proceso de resolución del conflicto sigue adelante", ha remarcado Sortu, quien ha justificado este convencimiento en que "así lo quiere la mayoría social de este país, porque la sociedad vasca está empujando y trabajando en este sentido".

Powell, exjefe del gabinete de Tony Blair, y McGuinness, viceprimer ministro de Irlanda del Norte y dirigente del Sinn Féin, han comenzado su ronda de contactos con Jonan Fernández, con quien también la han cerrado a última hora de la tarde en Bilbao.

Con los partidos, la primera cita ha sido con el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, en la sede de los nacionalistas de Sabin Extea.

A continuación, en un hotel cercano, Powell y McGuinness se han visto con el PSE-EE, cuya delegación ha estado encabezada por su secretario de Organización, Rodolfo Ares, y con los dirigentes de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria y Hasier Arraiz y Urko Ayarza.

Han completado la ronda con Geroa Bai, Ezker Anitza-IU y el representante de Sortu en el País Vasco francés, Xabier Larralde, antes de volver a verse con Jonan Fernández.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha delegado en Fernández al estimar que la visita de los mediadores solo satisface la estrategia de la izquierda abertzale y no aporta nada, al no estar previstos por ahora nuevos pasos de ETA para su desarme.

El lehendakari ha tomado esta postura después de las duras críticas recibidas por su implicación el pasado mes de febrero con los miembros de la Comisión Internacional de Verificación (CIV), liderada por Ram Manikkalingam, a quienes apoyó en Madrid cuando fueron citados a declarar por el juez tras aquella entrega simbólica de armas.

El Ejecutivo vasco ha acogido esta visita con cierto escepticismo ya que, como dijo ayer, martes, su portavoz, Josu Erkoreka, "ha acabado el tiempo del análisis y de la constatación" tras el cese de la actividad de ETA y ha llegado el momento de que la izquierda abertzale "cumpla los compromisos adquiridos".

El PSE también ve con frialdad la iniciativa de los mediadores y ha acudido "a escuchar", aunque cree que lo necesario es que "ETA y la izquierda abertzale den los pasos que tienen que dar", según han explicado a Efe fuentes socialistas.

El PP ha declinado la invitación al considerar que lo prioritario es avanzar en un acuerdo entre los vascos que rechace la historia de ETA.

El presidente del PP de Bizkaia, Antón Damborenea, ha explicado que su negativa a reunirse con los mediadores internacionales se debe a que no quieren "hacer propaganda ni la sopa gorda a Bildu".

El dirigente del PP ha subrayado que "ni mediadores, ni extraterrestres" pueden decir qué hay que hacer para terminar con ETA, porque la solución sólo vendrá "por la disolución de la banda y por el reconocimiento de que matar no estuvo bien".