Tributo a la diversidad

Los primeros en marcar los ritmos fueron Carlos Santana, el rapero haitiano-estadounidense Wyclef y el brasileño Alexandre Pires, que interpretaron la canción Dar um Jeito (Encontraremos el camino), uno de los temas oficiales del Mundial y que representa la pasión por el deporte más popular del planeta al referirse al sueño de un joven de conquistar el mundo mediante el fútbol.

Después, la colombiana Shakira protagonizó su tercera aparición consecutiva en una Copa del Mundo para interpretar junto al brasileño Carlinhos Brown el tema La la la (Brazil 2014). La pareja del futbolista azulgrana Gerard Piqué ya había declarado sentirse «muy emocionada» por competir en su tercer Mundial.

«Hola Brasil, ¡ya estoy aquí! Los extrañaba. ¡Estoy muy feliz de verlos de nuevo!», escribió en su cuenta de Twitter, después de llegar a Brasil junto a su pequeño hijo Milan Piqué. En Sudáfrica, Shakira puso a todo el mundo a bailar con su famoso Waka Waka. Y ya en el Mundial de Alemania 2006 también había sido protagonista con la contagiosa melodía de su canción Hips dont lie.

«No puedo olvidar que en 2010 encontré el amor de mi vida en un Mundial. Si no hubiese ido a Sudáfrica, mi hijo no habría nacido. Estar aquí tiene un enorme significado para mí porque yo me siento un poco brasileña y mi segunda lengua es el portugués», recordó Shakira, emocionada, en la rueda de prensa previa.

«Brasil recibe al mundo y le dice al mundo que todos son bienvenidos. Las personas se irán de aquí tras conocer nuestro pueblo y experimentar nuestra hospitalidad», afirmó Carlinhos Brown al ser preguntado por el espectáculo final.

La brasileña Ivete Sangalo dijo adiós al Mundial con un mix de canciones populares de su país, mientras que el grupo de percusión de la famosa escuela de samba carioca Academicos do Grande Rio llenó de ritmos y tambores el estadio antes de que los verdaderos protagonistas del día salieran a calentar.