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Ignacio Tylko
Miércoles, 25 de junio 2014, 18:06
El romanticismo italiano que propuso Cesare Prandelli, quien desde el principio abominó del tradicional estilo del 'catenaccio' y fabricó una selección más vistosa, al estilo de la España campeona, ha pasado a mejor vida tras el fracaso en el Mundial de Brasil. La 'Nazionale' deberá ... reconstruirse tras consumarse la dimisión real de Prandelli y del presidente de la Federación, y la renuncia simbólica de los jugadores que cayeron ante Uruguay.
Precisamente, el adiós del elegante preparador de Orzinuovi se produce tras fracasar con una de las versiones más defensivas de los 'azzurri' en los últimos tiempos. Les servía el empate ante los charrúas y eso condicionó el planteamiento conservador diseñado en Natal. También les arrinconó la expulsión de Marchisio, a falta de media hora, y el empuje de una Uruguay con mordiente.
"Cuando un proyecto técnico falla hay que asumir responsabilidades", dijo Prandelli tras consumarse la eliminación de otro grande de Europa. "Es mi responsabilidad y he anunciado a la Federación que he presentado mi dimisión", agregó el finalista de la Eurocopa Ucrania y Polonia que conquistó España en Kiev con un brillante 4-0 .
El presidente de la FIGC, Giancarlo Abete, también anunció su marcha poco después. "He convocado al consejo federal al que daré mi dimisión irrevocable. Esta decisión estaba tomada desde antes del Mundial", dijo Abete, "pero espero que Prandelli retire su dimisión".
Prandelli prolongó justo antes del Mundial su contrato hasta la próxima Eurocopa de Francia. ¿Podrá seguira hora? El 'calcio' ha vivido muchas situaciones rocambolescas, pero jamás un seleccionador de la 'squadra azzurra' eliminado en la primera fase de un Mundial ha seguido en el cargo.
El fracaso en Brasil es mayúsculo y presenta la circunstancia agravante de que tiene lugar después de otra eliminación temprana en Sudáfrica del equipo dirigido entonces por Marcello Lippi, que defendía el título mundial logrado en Alemania' 06. Italia no encadenaba dos despedidas prematuras desde el ciclo negro entre los años 1962 y 1966. En el Mundial de Inglaterra, fue apartada del camino por Corea del Norte. Ahora, cayó víctima de otro equipo revelación, Costa Rica.
El proyecto de Prandelli revolucionó el juego de Italia, fundamentado en la posesión de balón y el espíritu alegre y. Pero, paradojas del deporte, renegó de su credo para construir un 5-3-2 muy conservador en el partido decisivo, y perdió. Los transalpinos volvieron a bañarse en las fuentes del "catenaccio". Aunque se perdona a los apóstatas que ganan, los que pierden terminan en la cruz, recuerda AFP en una sentencia ilustradora.
Prandelli decidió anticiparse al torrente de críticas e imitió al Lippi de 2010, que empezó su conferencia de prensa después del infausto Eslovaquia-Italia (3-2) con su renuncia.
Aunque todavía es pronto para pensar en un sucesor, hay dos famosos entrenadores italianos libres: Luciano Spaletti, ex del Zenit San Petersburgo, y Massimiliano Allegri, ya fuera del Milan.
Buffon quiere seguir
Italia deberá reformarse. El timón Andrea Pirlo (35 años) ya 'dimitió' al anunciar durante el torneo que no seguiría con la selección. El buen partido de Verratti (22 años) contra Uruguay permite garantizar un sucesor válido al barbudo director de orquesta.
Gianluigi Buffon (36 años) tiene intención de continuar bajo los palos, aunque de todos modos la progresión de Salvatore Sirigu, que tuvo una buena actuación en el único partido ganado por Italia en Brasil (2-1 a Inglaterra), es tranquilizadora.
Del equipo derrotado en Natal, el que más peligra es el incorregible Mario Balotelli, ineficaz y de nuevo amonestado, lo que le deja fuera del primer partido de calificación para la Eurocopa 2016, el 9 de septiembre en Noruega. Se perderá el principio de la revolución.
Al final de una temporada poco convincente con el Milan, 'Súper Mario' marcó un gol ante Inglaterra, pero falló dos ocasiones ante Costa Rica y no hizo nada frente Uruguay, antes de retirarse en el descanso porque Prandelli tenía miedo de quedarse en inferioridad. Immobile pareció impresionado y hasta acomplejado por el alto nivel de un Mundial, pero debería disfrutar una nueva oportunidad.
En defensa, los soldados Andrea Barzagli y Giorgio Chiellini no parecen estar amenazados por falta de competidores, pero esta carencia de relevo es tal vez la peor noticia para Italia, tradicionalmente país de inmensos defensas, desde Claudio Gentile a Paolo Maldini, pasando por Franco Baresi y Fabio Cannavaro.
"Mordicos y remordimientos"
"Mordiscos y remordimientos", lamentaba este miércoles la prensa italiana. Varios diarios publican en portada una fotografía del hombro desnudo del defensa Giorgio Chiellini, mordido en el minuto 80 por el 'Pistolero' uruguayo sin que el árbitro lo viera y lo sancionara.
"Debacle". "Lo hemos perdido todo: el partido, el Mundial, el seleccionador y el presidente han dimitido. Más de eso, nos morimos", se lamenta la Gazzetta dello Sport.
"En la lucha con los vampiros, Italia choca con los dientes de Suárez y con la tarjeta roja mostrada por un árbitro apodado Drácula", afirma La Stampa en referencia a la polémica expulsión de Marchisio.
El Corriere della Sera ofrece una versión más optimista y subraya que el Mundial seguirá siendo a pesar de todo "memorable". "Prandelli, en cuatro años, ha creado el único equipo italiano capaz de salir adelante en el extranjero. No se puede decir lo mismo del mordedor Luis Suárez. Lo entenderá durante el largo reposo forzado que le espera, que no se puede honrar su bandera con los pies y deshonrarla con los dientes".
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