Enfado de Cesc con Del Bosque

Albiol es un tipo espontáneo, muy natural, y que compareció junto a David Silva, compañero y amigo desde coincidió en el Valencia con el canario, y pese a la situación que vive la selección logró sacar una sonrisa a los presentes en la sala de prensa. El del lunes es un partido que muchos consideran un trámite molesto, algo que el central niega. «La motivación es que estamos en un Mundial. Es verdad que estamos eliminados, pero tenemos que ganar y sumar puntos para no ser últimos de grupo. Estamos representando a un país y a una camiseta. Son los últimos 90 minutos. Ganar y sumar los tres puntos. Nada más. Ganar e irse a casa, por desgracia, pero es un Mundial. Eso es suficiente motivación».

Renovación en la selección

El defensa insistió en su tesis, negando que sea «un marrón» medirse a los australianos: «Para nada, qué va. Jugar con la selección española un Mundial es lo máximo. Me hubiera gustado jugar jugándonos algo, por la clasificación, pero nos jugamos el orgullo de ganar un partido en este Mundial. Hay que dar la cara y un buen nivel; nos dedicamos a esto. Cada partido debe ser una ilusión, ya sea en un Mundial o un amistoso en Vietnam. Hemos ido a jugar a mil sitios con España y siempre dimos buen rendimiento. Imagínate el lunes contra Australia. Hay que irse de vacaciones con buenas sensaciones. Los que jueguen tendrán ganas de vencer y de sacar los tres puntos». Y es que el 'Chori' espera seguir repitiendo en el futuro. «Tengo 28 años y voy a seguir jugando al fútbol. Claro que quiero seguir si cuentan conmigo. Estoy disponible para la selección y para cualquier equipo que me quiera. Esa es la idea», dijo arrancando alguna risa en la sala.

Albiol no se muestra preocupado por ese pequeño incidente ni tampoco por la renovación en 'La Roja'. Entiende que es un proceso habitual. «Después de un Mundial, siempre hay jugadores que se van y que vienen. Habrá cosas nuevas, como en los últimos años. Estamos fastidiados por no hacer bien nuestro trabajo. Lo demás se irá viendo. Hay tiempo, poco a poco. Cada uno tomará la decisión que tenga que tomar. Pasa aquí y pasa en todas las selecciones después de un campeonato mundial y una Eurocopa», explicó. No cree que el bajón de España se deba al calendario, aunque reconoció que «personalmente» le gustaría que «la Copa fuera a un partido en España». «Los equipos han venido aquí con la misma carga de partidos, por lo que no es un motivo para nuestro rendimiento».

El central del Nápoles reconoció que, una vez que España está eliminada, le importa poco quién gane el torneo, ya sea Francia o cualquier otro candidato. «Lo que haga Francia nos da igual. Nosotros estamos fastidiados por no haber hecho nuestro trabajo en el Mundial. Nos hemos llevado un palo bastante duro. Les felicitamos por los dos partidos que han hecho, pero nada más. Lo que hagan ellos u otros nos da igual. Por desgracia terminamos el lunes el Mundial», lamentó. El equipo gozó de la tarde libre y aprovechó para hacer algunas compras en Curitiba.