«Con ese calor es complicado mantener el ritmo»

«La prueba es positiva por jugar en estas condiciones que son las que nos podemos encontrar en Brasil: mucho calor, era difícil mantener un ritmo alto de competición durante todo el tiempo, después de unos cuantos sprints era necesario descansar por el cansancio, el campo con el césped alto... Las condiciones no eran buenas pero es positivo haberlo hecho porque son las que nos podemos encontrar allí en algún tipo de partidos», reconocía el bigoleador David Villa tras el partido.

Lluvia en Curitiba

La selección viajó a Washington ya desde el pasado lunes para aclimatarse al nuevo continente, al nuevo horario y también al clima aunque la estancia en tierras americanas estaba pensada más en el primer partido que en otra cosa. «UN partido duro, con el calor y con un campo difícil pero el equipo lo ha hecho bien. Un partido más para prepararnos contra Holanda y quizá el que más se parezca», reconocía De Gea. El partido, por tanto, sí que sirvió como banco de pruebas, pero lo demás poco se parece a lo que vayan a vivir en Brasil durante la concentración. Estos días el equipo había estado viviendo en temperaturas mínimas de 18 o 20 grados, probablemente las que serán máximas que vaya a vivir en Curitiba donde ya ha montado su cuartel general al menos hasta el 23, cuando disputen el último partido de la primera fase ante Australia. A la llegada del equipo el domingo había una alta humedad, por las constantes lluvias que han provocado las crecidas del río que han provocado muertos en la capitál de Paraná.