Estos son los 24 nuevos radares de velocidad de la DGT

Durante un mes, los conductores que circulen a una velocidad superior a la permitida por las carreteras donde están ubicados estos nuevos radares, recibirán una carta informativa advirtiéndoles de que han sido captados por un radar con el exceso de velocidad.

A partir del mes el conductor que supere la velocidad será sancionado y recibirá una multa con el importe correspondiente. A día de hoy, se estima que en España hay más de 2.900 radares fijos, móviles y de tramo. Esta cifra incluye una amplia variedad de dispositivos de control de velocidad.

La ubicación de estos 24 primeros radares afecta al norte, este y sur de la Península, más concretamente a las provincias de A Coruña, Asturias, Lugo, Ourense, Pontevedra, Almería, Málaga, Granada y en el Levante en Alicante y Valencia, tal y como se puede ver en los cuadros.

Según la DGT, en 2025 se cumplen dos décadas de la llegada del primer plan de radares fijos y esta medida junto con otras adoptadas han ayudado a la reducción en estos años de un 75 por ciento del número de víctimas mortales.

Los radares fijos están instalados en puntos estratégicos de las carreteras, como túneles, curvas o rectas largas. Los radares móviles están en vehículos equipados con los dispositivos, Se desplazan por las carreteras, cambiando de ubicación con frecuencia. Los radares de tramo, por su parte, miden la velocidad media en un tramo determinado de carretera.

Existen numerosas aplicaciones móviles especializadas en tráfico que, mediante la colaboración de los usuarios, pueden proporcionar información sobre la ubicación de radares fijos y móviles en tiempo real. Sin embargo, es importante verificar la fiabilidad de estas aplicaciones y tener en cuenta que la información puede no ser siempre precisa.

En España, el uso de detectores de radar está estrictamente prohibido. Esto incluye tanto los detectores pasivos, que simplemente alertan al conductor de la presencia de un radar, como los inhibidores de radar, que bloquean la señal del radar.

Sin embargo sí que son legales los denominados avisadores de radar: Estos dispositivos utilizan bases de datos de la ubicación de radares fijos para alertar al conductor de su proximidad. Son legales siempre y cuando no interfieran en el funcionamiento de los radares.

El Plan Estratégico de Seguridad Vial 2005-2008 de la Dirección General de Tráfico, siguiendo las directrices de organismos internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Organización Mundial de la Salud (OMS), Naciones Unidas y la Unión Europea entre otros, establecía la instalación de 500 secciones fijas de control de velocidad que se complementaron con 300 cinemómetros móviles operados por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.

Desde entonces, hasta hora los puntos de control de velocidad siguen salvando vidas, porque la velocidad inadecuada sigue estando presente como factor concurrente en el 21% de los siniestros mortales.