Abarth 500e: La picadura más eléctrica del escorpión

Los más puristas consideran que dejar el motor de combustión era una traición a la esencia. Esgrimen argumentos como aceleración, sensaciones de conducción y, sobre todo, el sonido. Un sonido característico de un motor de explosión que pone la piel de gallina al arrancarlo. Todos esos argumentos se diluyen cuando pones al mando del nuevo Abarth 500e como pudimos comprobar por carreteras gallegas en la presentación nacional del modelo.

Si hablamos de aceleración, no hay mayor aceleración que la de un eléctrico, precisamente porque la respuesta es automática cuando tocas el acelerador. El motor eléctrico de 154 CV hace que pase de 0 a 100 km/h en tan solo siete segundos y que te pega al asiento ergonómico. Las sensaciones de conducción son muy similares a las que se experimentan al mando del Abarth 595 de gasolina, que tiene 25 CV más que el eléctrico.

Sin embargo, donde se hace fuerte la nueva versión es el paso de curva, donde el 'grip' (agarre) es muy superior a su antecesor. Se nota que el centro de gravedad está más bajo por las baterías y que el peso ayuda a que el pequeño escorpión se pegue como una lapa al asfalto.

El sonido, tan característico de Abarth, que hace que la gente se vuelva esperando la llegada de un bólido, en la versión eléctrica está enlatado. Es cierto que no suena exactamente igual cuando aceleras, pero transmite fuerza y poderío cuando vas al volante.

También se ha trabajado mucho en la velocidad de carga, para acortar al máximo las paradas: cinco minutos bastan para obtener 50 km más de autonomía. En 35 minutos, se logra recargar la batería en un 80%.

Ofrece tres modos de conducción diferentes, pensados para entornos muy diversos: Turismo, Scorpion Street y Scorpion Track. Con el modo Turismo la aceleración es más suave y se reclama menos potencia para ofrecer una experiencia de conducción eficiente sin renunciar al placer. Por su parte, el modo Scorpion Street ofrece prestaciones máximas a la vez que incrementa el frenado regenerativo. Por último, el modo Scorpion Track está pensado para quienes desean lo máximo en prestaciones.

En resumen, el nuevo Abarth 500e es más ágil y emocionante que su predecesor, el Abarth 695, en cuanto a capacidad de respuesta. De hecho, es un segundo más rápido en el arranque urbano, lo cual implica una aceleración un 50% más veloz de 20 a 40 km/h que su equivalente impulsado por gasolina. El nuevo Abarth 500e es también más veloz fuera de la ciudad, por ejemplo, en las curvas cerradas, donde de 40 a 60 km/h puede alcanzar la velocidad objetivo en apenas 1,5 segundos, mucho más rápido que su versión de gasolina, que se retrasa 15 metros, al alcanzar los 60 km/h un segundo después.

Por último, en carretera abierta, el nuevo Abarth 500e se comporta con mayor rapidez que la versión de gasolina, al alcanzar una velocidad de 100 km/h (a partir de 60 km/h) mientras que el equivalente de gasolina sigue marchando a 91 km/h, con una diferencia aproximada de un segundo.

Coincidiendo con su lanzamiento, el Abarth 500e se lanza con la serie especial Scorpionissima, tanto en Berlina como en Cabrio, que se caracteriza por su completo nivel de equipamiento y sus atrevidos colores Verde Ácido y Azul Poison.

El nuevo Abarth 500e Eléctrico Scorpionissima trae de serie exclusivas llantas de aleación gris titanio diamantadas de 46cm (18»), que acercan al conductor a la carretera con su gran adherencia y un diseño dinámico y punzante, techo de cristal fijo y lunas traseras tintadas. También se suministra con avanzados pedales deportivos de acero y placa protectora con logo grabado, que evoca vibraciones de pista de competición y de la reactividad de los coches Abarth que hicieron historia en la carretera, un nuevo aro de salpicadero gris titanio y placas de paso de puerta de acero con la marca Abarth en relieve.

El nuevo diseño deportivo de los asientos está enriquecido con el Escorpión estampado en Alcántara, un material de primera que le otorga un aspecto oscuro y deportivo, y el máximo confort que ofrece el reposacabezas integrado, con el Escorpión en verde Acid grabado por láser en el tejido Alcántara y costuras deportivas dobles.