Juan Roig Valor
Lunes, 12 de febrero 2024, 14:14
El año nuevo chino ha arrancado con la peor vandalización a un coche autónomo. Un Jaguar I-Pace de la compañía de robotaxis de Alphabet (Google), tuvo la mala fortuna de cruzar el barrio chino de San Francisco, uno de los más grandes y antiguos ... de Estados Unidos, durante las celebraciones del festival de primavera, que da comienzo al calendario lunar.
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Lo que al principio comenzó con pintadas sobre el coche rápidamente fue escalando de violencia, hasta que arrojaron fuegos artificiales en su interior y acabó con su incendio. Según el Departamento de Bomberos de San Francisco, el fuego se extinguió a las 9 de la noche y no había ningún pasajero en el vehículo.
Desde la compañía, señalaron que el coche acababa de terminar un viaje en el que se bajaron clientes de Waymo. «Estamos trabajando de cerca con la Polícía para investigar el asunto», afirmaron en un comunicado.
Para la Junta de Supervisores –el organismo administrativo a nivel de condado– de San Francisco, «fue un evento terrible. Incendiar un coche eléctrico es extremadamente peligroso, se podría haber hecho daño a mucha gente. Además, se trataba del año nuevo chino, uno de los días más importantes del año para Chinatown, con miles de turistas participando en las celebraciones».
Los eventos del sábado pasado ponen de manifiesto una realidad de los coches autónomos: su incapacidad a la hora de resistir al vandalismo por parte de una multitud.
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Aún no se sabe cómo van a responder las empresas si los incidentes se vuelven recurrentes, pero simplemente el valor de los sensores que permiten su funcionamiento ponen en riesgo que se implemente a gran escala en las ciudades.
Desde 2022, Waymo puede operar en el Estado de California su servicio de robotaxis –en las ciudades de San Francisco, Los Altos, Mountain View, Palo Alto y Sunnyvale–. Desde 2018, estaba funcionando de manera provisional y no podía cobrar por sus viajes.
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Waymo es la segunda empresa de robotaxis en conseguir la aprobación por parte de la DMV, la autoridad de Tráfico de EEUU, en ofrecer viajes de manera autónoma. La primera fue Cruise, en la que General Motors tiene una participación.
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