Futuro incierto para Almussafes: Ford frena sus planes de electrificación

UGT, el sindicato mayoritario de la planta, afirmó en un comunicado que esto sitúa «en el alambre» a Ford Europa en su conjunto. Además, recalcan, «mientras Ford reevalúa las posibilidades de electrificación para Almussafes, debe garantizar una carga de trabajo suficiente para mantener a la plantilla».

En otras palabras, solicitan potenciar la fabricación de vehículos híbridos. Actualmente, de las líneas de montaje de Valencia salen los Kuga y las furgonetas Transit y Tourneo Connect con una frecuencia inferior a las 200.000 unidades al año.

La fábrica no es solo capaz de producir esa cifra, sino que los representantes sindicales estiman que es la que se debería consolidar para «permitir la transición a la electrificación sin sobresaltos».

Sin embargo, los modelos comerciales tienen previsto su fin levantino. En diciembre, las que se exportan al mercado norteamericano dejarán de hacerlo y en marzo, las que van a Europa se empezarán a ensamblar en la fábrica de Poznan (Polonia), de la mano de Volkswagen.

En junio del año pasado, Almussafes ofreció condiciones más favorables que la planta alemana de Saarlouis y recibió, así, la adjudicación de una plataforma para modelos eléctricos que, en principio, garantizaría su futuro industrial más allá del 2030.

De no revisar el Plan de Electrificación durante el periodo de transición de modelos térmicos a eléctricos, «la empresa no podrá negociar más medidas de flexibilidad con UGT». Para recibir la plataforma eléctrica, accedieron a aumentar la duración de las jornadas o incrementar el número de sábados laborables hasta 18.

De momento, el primer acto de protesta serán las movilizaciones que se llevarán a cabo en Colonia (Alemania), donde se ubica la sede de Ford Europa. La próxima reunión que tendrá el Comité de Empresa de Almussafes con la dirección se ha emplazado en diciembre.

El mercado de vehículos eléctricos está mostrando señales de ralentización a nivel global y ya ha afectado las cadenas de montaje de otros fabricantes. Un ejemplo es el de Volkswagen en Zwickau (Alemania), donde se redujo de tres a dos turnos la línea encargada de producir el VW ID.3 y el Cupra Born.

«Esta decisión asegura que las operaciones permanecen productivas y que la fábrica seguirá siendo viable», afirmó un portavoz al medio especializado Automobilwoche. Zwickau es la primera fábrica del consorcio alemán que pasó de producir modelos térmicos a hacerlo exclusivamente con eléctricos.