Imagen de la Administración de Loterías número 6 de Logroño en plena venta navideña. Justo Rodríguez
Lotería de Navidad 2021

¿Cuánto me debe tocar para retirarme?

Siete décimos del Gordo bien invertidos pueden generar una renta de 3.500 euros al mes hasta los 90 años si ahora tienes 30. Si has cumplido los sesenta, solo necesitarás dos boletos

Miércoles, 22 de diciembre 2021

Un viaje a un lugar paradisíaco, un coche de lujo, una casa con piscina climatizada, dejar de trabajar... Son sueños que se repiten cada 22 de diciembre, antes de que los niños de San Ildefonso nos vuelvan a decepcionar al cantar un número diferente al ... nuestro cuando sale la bola del Gordo. Esos caprichos son lo que nos gustaría, pero no lo que haríamos con el dinero. Según una encuesta del comparador bancario iAhorro, el 44,9% de los españoles dedicaría el premio a tapar agujeros, el 25,1% a ahorrar y el 18,9% invertiría en vivienda, cosas mucho más aburridas, pero más pegadas a la realidad. Aunque estamos en fechas de ilusión, así que volvamos a lo que nos interesa: retirarnos y vivir bien. ¿Es viable? La respuesta de los expertos es unánime: no. «Ganar la lotería no significa ser millonarios eternamente o estar en una situación holgada de por vida», recuerdan desde Finanzas Para Todos, plan de educación financiera puesto en marcha por el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Pero aquí estamos en otro punto, en el de que todo es posible. Y tenemos la respuesta de cuántos décimos necesitamos -además de suerte, que hay 100.000 números y 1.807 premios- para no volver a trabajar: entre dos y siete.

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Paula Satrústegui, socia de Abante Asesores, hace las cuentas con cuatro ejemplos. Todos son parejas, de 30, 40, 50 y 60, años que dispondrán de 3.500 euros al mes para sus gastos -si nos toca la lotería queremos vivir bien- hasta los 90 años, ligeramente por encima de la esperanza de vida en La Rioja, que se sitúa en 79,58 años para los hombres y 85,4 para las mujeres. En los tres primeros casos, además de esos 3.500 euros, necesitarán otros 750 mensuales hasta los 65 para pagar las hipotecas de sus viviendas.

En cada uno de los supuestos, la asesora patrimonial plantea tres escenarios: con una inversión conservadora, una moderada y otra más arriesgada. «La gente es muy conservadora, pero la tendencia está cambiando, porque los fondos fijos no superan ni la inflación, pierdes poder adquisitivo cada año, y se está arriesgando un poco más», analiza.

En 1921 el Gordo suponía el salario de casi 94 años

El 28.876 fue el premio Gordo en 1921. El portador de un décimo recibía 150.000 pesetas, el equivalente al salario medio de 94 años. Suficiente para retirarse teniendo en cuenta que, recién terminada la pandemia de gripe española, la esperanza de vida apenas superaba los 40 años. Hoy, los 400.000 euros, después de pagar a Hacienda, equivaldrían a 14 años de sueldo. Entonces, había más opciones de ser el ganador -los 100.000 números empezaron a jugarse en 2011-, pero menos de comprar el décimo: ahora, los 20 euros del boleto suponen el 1% de la nómina mensual, y las 50 pesetas de hace un siglo, el 37,5%.

De esta manera, nos centraremos en la segunda de las hipótesis, metiendo en activos financieros de renta variable -fondos de inversión, divisas, acciones...- el 50% del dinero del premio. La pareja de 60 años es la única que araña, con menos de dos décimos, la jubilación permanente. Cada uno de los miembros contaría con su propia pensión de 1.000 euros, de manera que, para vivir cómodamente hasta los 90, necesitarían unos 500.000 euros, algo más de un décimo.

Con hijos, inviable

Pero el resto de ejemplos, que si se retiran antes de tiempo no tendrán derecho a la prestación económica por haber trabajado, solo tendrán el premio y el rendimiento que le saquen. Los treintañeros necesitarán cerca de 2 millones, casi cinco décimos; los cuarentones, 1,8 millones, el equivalente a 4,5 boletos; y la pareja de 50, 1,5 millones, casi cuatro.

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La familia media, sin embargo, no la componen 2 personas, sino 2,5, pero se han dejado fuera del análisis posibles hijos porque variarían mucho las cuentas en función «del número, la edad, el tipo de educación (pública, concertada, privada...)», precisa la asesora. Con ellos, sea como sea, la meta de retirarse -y vivir holgadamente- sería ya prácticamente inalcanzable.

Según un estudio de la ONG Save The Children sobre el coste de la crianza, la cuantía mínima para cubrir las necesidades básicas de un hijo entre los 0 y los 17 años -recordemos que la edad media de emancipación es de 30,2 años- asciende a 138.552 euros, por lo que la familia clásica, con dos niños, necesitaría al menos otro décimo y que se fueran pronto de casa sin pasar por la universidad.

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Y si finalmente la suerte le sonríe, y en el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad consigue tanto dinero como para dejar de trabajar, haga caso a los expertos y tenga «cabeza», no se deje llevar por «la euforia» porque puede ser su ruina. Satrústegui aconseja tomarse «un tiempo de seis meses antes de comenzar a gastar o invertir». En ese tiempo puede quemarle el dinero en las manos, ¿pero qué son seis meses frente a toda una vida?

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