El volumen de existencias de Rioja al inicio del verano es el más alto de 5 años

Los bodegas tipificadas como cosecheros conservan vinos en sus calados de las añadas 2001 al 2016 por un volumen total de 3,3 millones de litros. Por su parte, las cooperativas guardan existencias de diferentes añadas por un volumen total de 47,5 millones de litros de vino, mientras que los almacenistas tienen 2,6 millones de litros de vino en sus botelleros y en sus depósitos.

Son las bodegas criadoras (a partir de 50 barricas), las que conservan el grueso de las existencias, con 644,5 millones de litros, es decir, casi el 93% del total. De los 697,9 millones de litros de vino contabilizados como existencias de Rioja, 16,6 millones de litros serían blancos; los rosados alcanzan 9,4 millones de litros y los tintos, 621,8 millones de litros de vino.

Lógicamente, la última añada, la de 2016, es la que mayor disponibilidad de vino almacenado acumula, con 272,4 millones de litros (se ampararon 315,5 millones de litros de vino), con lo que parece claro que las bodegas están conservando parcialmente el vino después de los episodios de helada y de sequía que se han vivido este año y a la espera de cómo puede comportarse finalmente esta cosecha.

De estos 272,4 millones de litros de vino, 14,4 son de blanco, 8,9 millones de rosado y 249 millones de tinto. Otras añadas destacadas por el volumen de litros guardados son la 2015, con 186 millones de litros, y la 2014, con 121 millones de litros.

Por el contrario, las cosechas más escasas en volumen de existencias son las de las añadas 1984, con 1.585 litros, y la de 1990, con 7.579 litros. En este sentido, la estadística oficial del Consejo Regulador remonta el control de registros individualizados de la existencia de añadas hasta 1980, aunque algunas bodegas siguen guardando existencias de añadas más antiguas, catalogadas como CA, y que, junto con las registradas como Conjunto de Varias Cosechas (CVC), no llegan al millón de litros.