Rioja afronta su mayor desafío histórico con el proyecto de escisión que impulsa el PNV

Más allá de lo expuesto a este periódico por el director general del Consejo Regulador, José Luis Lapuente, que en la tarde del lunes advirtió que la propuesta implica «despiezar y hundir la Denominación de Origen», el ente ha optado por guardar silencio hasta el próximo lunes, cuando ha convocado un pleno extraordinario y monográfico para abordar la cuestión. Será al término del encuentro cuando su presidente, Fernando Ezquerro, haga una valoración pública al respecto. En todo caso, en un comunicado, el Consejo Regulador recordaba que en julio de 2020, «en un documento interno, se recogió el compromiso de utilizar todos los recursos disponibles para abortar lo que se entendió [esta propuesta] como un intento para crear de facto una nueva denominación de origen». Aquel documento, sostiene el Consejo reafirmó «la importancia de la unidad y unicidad de la Denominación [...] y la atribución exclusiva de su gestión al sector, con el fin de garantizar la calidad de los vinos amparados, la leal competencia entre los inscritos y los intereses de los consumidores».

También el lunes, la presidenta de La Rioja ha convocado una reunión urgente de todo el sector relacionado directa o indirectamente con el mundo del vino para «consensuar una posición común» respecto a la iniciativa presentada en el Congreso de los Diputados por el PNV. Al encuentro, que se celebrará a las 16.00 horas en la Bodega de La Grajera, están invitados, según especificó el Gobierno regional, «el Consejo Regulador y sus asociaciones sectoriales, todos los grupos parlamentarios de La Rioja, todos los senadores y diputados riojanos, sindicatos, asociaciones agrarias, FER y Cámara de Comercio, universidad y medios de comunicación».

Andreu aseguró que esa «posición común» que se busca es la que Rioja ha defendido «desde los orígenes»: «Tenemos la suerte de tener una Denominación de Origen de prestigio», enfatizó. Por ello, la presidenta quiso mandar un «mensaje de tranquilidad» a un sector que ha recibido sobresaltado la iniciativa del PNV. Con el no del PP ya asegurado y el previsible apoyo de ERC y Bildu, la suerte de la proposición queda en manos de la mayoría formada por PSOE y Unidas Podemos.