El «nuevo camino» de las bodegas de ABRA sorprende en Álava y agrada en La Rioja

Este movimiento, la apertura de un «nuevo camino», según las palabras de su presidente, Itxaso Compañón, que ahora emprende este grupo de bodegueros al otro lado del Ebro –en un número indeterminado pero que en los últimos años ha ido a la baja, desde el centenar largo a apenas la mitad– ha sorprendido en círculos institucionales y vitivinícolas de Álava. Hablan de la 'ciaboga' de ABRA para definir, en el argot marino, una maniobra inesperada y con la que nadie contaba.

El foco de la asociación se pone a partir de ahora casi exclusivamente en incidir en la diferenciación de los vinos 'made in Rioja Alavesa'. Los miembros del colectivo entienden que es la mejor vía, quizá la única, para intentar recuperar la rentabilidad de sus explotaciones y poner fin a la sangría de cierres de bodegas y de abandonos de negocios. «La situación en la comarca es muy preocupante», aseguran diferentes agentes consultados.

Es evidente que tampoco la aventura de Viñedos de Álava ha salido como esperaban sus impulsores. Y no quieren caer en el mismo error porque, de hecho, el miércoles cuando ABRA hizo público su movimiento ya adquirió el compromiso «que no consiste en crear nuevas denominaciones sino en fortalecer aquello que nos hace únicos». Y, según ha podido saber este periódico, tampoco el PNV está ahora en esa onda y también tiene metido en el congelador el proyecto de una denominación de origen para Rioja Alavesa pero dentro de Rioja aunque con consejo regulador propio. En noviembre se cumplirán tres años de aquel movimiento que hicieron los nacionalistas vascos en 2021 llevando al Congreso de los Diputados una propuesta que también generó críticas en la comarca –bodegueros y viticultores de Rioja Alavesa demandaban una mayor información– y más todavía en a comunidad autónoma riojana. Finalmente el PNV retiró la iniciativa por falta de apoyos.

Y ahora apuesta por guardar silencio y no hacer ruido. Mantiene, eso sí, su idea de que el Consejo Regulador y la Denominación de Origen tienen que «descentralizarse» –de territorio riojano y logroñés– y reclama para Rioja Alavesa mayores cuotas de participación y protagonismo pero «sin que haya una desmembración».

¿Y cómo se ve a este lado del Ebro esa 'ciaboga' de ABRA? Dos de las organizaciones con mayor peso en el Consejo, el Grupo Rioja –también aglutina a las principales bodegas de Rioja Alavesa– y la Federación de Cooperativas (Fecoar), aplauden esta maniobra. «Viñedos de Álava era un callejón sin salida, que en nuestra opinión ni siquiera cumplía la legislación. Si ahora ABRA decide aparcar esa iniciativa, por lo que hemos visto en los medios de comunicación porque no tenemos información de primera mano, y se centra en diferenciar sus vinos y en generar valor para Rioja, nos parece bien», asegura Íñigo Torres, director general del Grupo Rioja.

Mientras que el gerente de la Federación de Cooperativas de La Rioja, Julián García Plisson, también recordó la «crítica unánime de todas las asociaciones» del Consejo a la denominación rupturista que planteaba ABRA. «Su renuncia es un paso positivo. Ahora esperemos que esa apuesta por diferenciar los vinos se haga dentro de la DOC y con las herramientas legales», aseguró.