«He aprovechado mi punto fuerte con los hierros para conseguir un buen resultado»

Pablo Santaolalla es un amante acérrimo del golf. Como participante fijo de otras ediciones del torneo, el golfista se animó a competir el pasado fin de semana aprovechando la cata de Perica en una jornada inmejorable a nivel deportivo e insuperable en cuanto al clima. Temperaturas suaves con nubes por la mañana que permitieron que el ganador en la clasificación scratch volviera a reencontrase con un podio gracias a su tarjeta de 32 puntos después de superar los 18 hoyos del campo de La Grajera. Reconocimiento y botella de vino de las bodegas de San Asensio que avalan las arduas semanas de entrenamiento de este riojano en el torneo Rioja&Vino.

– Como amante del golf, quedar primero en la clasificación scratch es la muestra del trabajo bien hecho, ¿verdad?

– Sin duda. Venía de dos semanas de entrenar bastante, algo que se ha podido ver durante la jornada. Además, el tiempo ha acompañado mucho al no tener un día especialmente caluroso y luego el campo estaba en perfecto estado, tanto los greenes como las calles. Ha sido una jornada favorable en todos los sentidos.

– ¿Se podría decir que ha sido una jornada perfecta?

– Sí y no. Ha sido buena por las sensaciones aunque no he llegado a cumplir mi hándicap, que es de 1,8, pero bueno estoy contento con lo que he hecho. Además, me alegra mucho volver a participar en el torneo de Rioja&Vino. Hace años gané la liga del torneo pero con un hándicap más alto. Ahora, es verdad, que ganar la general con el nivel de juego que tengo actualmente es casi imposible. Por todo ello, nosotros optamos a premios scratch en una jornada que se ha convertido en un acto social que nos permite reunirnos con viejos amigos. Pero bueno, está divertido y entretenido por lo que estoy muy agradecido al campo, a la organización y a todo el mundo que forma parte de esto.

– ¿Cuál cree que ha podido ser su punto fuerte?

– Llevo bastantes años jugando y me considero un golfista de hierros. Mi especialidad no es el drive, tampoco soy un gran pateador pero con los hierros soy bastante certero. Entonces, los tiros a green han sido buenos y he aprovechado mi punto fuerte con los hierros para conseguir un buen resultado al finalizar con 32 puntos en mi tarjeta.

– ¿Qué nivel ha podido ver entre sus compañeros?

– He notado que la gente estaba bien y contenta, sobre todo, por el tiempo. Venimos de una semana con temperaturas extremas y hoy –por el sábado– hemos tenido como 14 grados a primera hora y cerca de los 25 al final de la jornada. Además, se acaba de celebrar el torneo profesional femenino en La Grajera, pero el campo estaba en perfecto estado para poder patearlo.

– Ha podido catar cuatro diferentes vinos de bodegas Perica ¿qué le han parecido?

– Por la mañana no he querido probar los vinos porque no acostumbro a beber cuando juego; Al igual que tampoco conduzco cuando bebo alcohol. Por la tarde ha cambiado la cosa. Hemos podido catar dos vinos de bodegas: un blanco y un tinto. Tengo que reconocer que el blanco ha sido mi favorito, sobre todo, por la época en la que lo estamos degustando aunque el tinto del año 2011 también me ha impresionado.

– Pese a no beber durante el torneo ¿qué le parece este tipo de iniciativas?

– No lo hago durante, lo que no implica que no lo haga después. Es una maravilla que, tras una larga jornada de golf, te puedas juntar con amigos y brindar por el trabajo bien hecho. Una cosa no quita a la otra. En La Rioja tenemos la suerte de contar con cientos de bodegas con mucho nivel, al igual que tenemos la enorme fortuna de tener tres campos de golf. Entonces, golf y vino es la combinación perfecta y este torneo es la muestra de ello.