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Paco Oliván, con sus hijas Alba y Sara, en Finca la Oración. Justo Rodríguez
La mejor finca del mundo

Finca La Oración | Ventas Blancas

La mejor finca del mundo

Paco Oliván construye, en torno a Finca la Oración, cuarenta hectáreas en el desconocido valle del Jubera, un sueño que a base de ilusión, esfuerzo y perseverancia durante 25 años continúa hoy tomando forma

Alberto Gil

Logroño

Domingo, 19 de noviembre 2023, 20:14

La mejor finca del mundo. Así al menos define Paco Oliván (Hacienda Grimón, Ventas Blancas) a Finca La Oración, una explotación de 40 hectáreas que compró hace 25 años y sobre la que poco a poco ha ido construyendo un sueño: viñedo (20 hectáreas), olivar (8) y almendro (12) en una zona muy desconocida de Rioja y que el viticultor considera «la de mayor diversidad, tanto de flora como de fauna, de toda la región». «Esta comarca ha sido 'víctima' de grandes bodegas –explica–, que venían buscando la frescura de sus suelos y la sanidad de las uvas que garantiza el cierzo y los elevados contrastes térmicos entre en día y la noche, pero nunca han querido hablar de este 'terroir' porque siempre han mezclado las uvas».

Paco Oliván vive desde hace tiempo apartado del acelerado mundo en su bodega (Hacienda Grimón)y vivienda, en la aldea de Ventas Blancas. Hay que subir hasta los 600 metros para llegar hasta Finca la Oración, en el término de Santa Engracia de Jubera. Delimitada en sus esquinas y entradas por cipreses, sus suelos son arcillas rojas muy sueltas, ideales para elaborar blancos y tintos de mucha frescura.

Lejos de caer en la tentación del casi monocultivo de tempranillo a finales de los noventa y comienzos del siglo pasado, el viticultor no renunció a la variedad reina de Rioja –con la que elabora su vino Finca la Oración–, pero sobre todo lo hizo por gracianos, garnachas, viuras y, posteriormente, con la apertura a nuevas variedades blancas, por sauvignon blanc y chardonnay: «Hice muchas pruebas antes de plantar y, aunque estas dos últimas son uvas foráneas, se adaptaban a la perfección en esta zona fría». «Las tierras de Finca la Oración son secanos muy frescos, ideales para cultivos leñosos como la viña o frutales como el olivo y el almendro».

Finca La Oración | Tempranillo 2019

Finca La Oración | Tempranillo 2019
  • 100% tempranillo de la finca del mismo nombre, con fermentación maloláctica en barrica para un vino sedoso y elegante. 31€

  • LA BODEGA :

  • Dirección C/Gallera Nº6., Ventas Blancas

  • Año de fundación: 1998

  • Contacto info@haciendagrimon.com. 941 48 21 84

El viticultor había ideado incluso una bodega 'château' en torno a su querida Finca la Oración: «Tuve el proyecto arquitectónico, incluso la financiación bancaria para construir una bodega con hotel de lujo, pero llegó la crisis financiera», recuerda. «Ahora –continúa– pienso que fue una suerte ya que lo que hice fue centrarme en la bodega familiar de Ventas Blancas, en ir ampliando y comprando microdepósitos para elaborar a la carta, casi parcela por parcela».

18 vinos distintos

De hecho, Oliván tiene en el mercado nada más y nada menos que 18 referencias y cada año idea una nueva:«Soy feliz experimentando, y ahora es mi hija Sara la que se dedica a la comercialización, así que es más problema suyo que mío», bromea.

Las ocas de 'La Oración' se encargan de ayudar a mantener el manto vegetal de la viña Justo Rodríguez

Genio y figura, su último lanzamiento ha sido un cupaje de viura, sauvignon blanc y chardonnay criado de forma separada por variedades en barrica antes del ensamblaje final y que ha bautizado 'Pa' mis amigos', con una etiqueta de una peineta en toda regla: «Son unos pocos cientos de botellas y con esto de las redes sociales otros tantos amigos se pusieron tan contentos con la broma que agoté la primera añada en unas horas...», explica entre risas. El viñedo lo trabaja sin herbicidas desde hace muchos años y ahora acaba de empezar con la certificación ecológica: «Como estoy solo, de hecho la finca está vallada por los corzos, puedo hacer lo que quiera y ahora estoy cada día más interesado en la biodinámica que, seguramente, acabaremos aplicando en los viñedos».

Justo Rodríguez

Alba y Sara, sus dos hijas, el relevo

Paco Oliván no es un desconocido del sector del vino. Comenzó de comercial con José Palacios (Palacios Remondo), el padre de la saga de los bodegueros más internacionales de Rioja. Pasó por Marqués de Cáceres en plena expansión nacional e internacional y estuvo al frente de la dirección de Castillo de Sajazarra. Cientos de miles de kilómetros en sus zapatos hasta que decidió volver a su pueblo, a Ventas Blancas. Sus hijas, Alba (enología), y Sara (administración y ventas) ya trabajan en Hacienda Grimón: «Feliz no, lo siguiente. Hubiera vendido todo menos Finca la Oración si ellas no quisieran dedicarse a esto, pero qué más se puede pedir que trabajar con tus hijas».

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