La eliminación total del vino de mesa en Rioja se pospone al menos hasta 2025

UAGR alertaba en los días previos de que «la posibilidad de generar vino de mesa con el exceso de transformación entre el 69% permitido esta campaña y el 74% máximo que permite el pliego de condiciones de la DOCa Rioja supone un claro incumplimiento» de ese acuerdo alcanzado hace dos semanas. En este sentido, el secretario de Organización de UPA recordaba que «no tiene sentido obligar a destilar la uva excedentaria y no se haga lo mismo con el rendimiento de transformación excesivo del vino». Porque no se cerraba el gripo de ese vino de mesa y hasta 13 millones de litros no amparados podrían generarse.

Pero para hacer esas modificaciones «había que cambiar las normas de vendimia que acabamos de aprobar», ha recordado Álex Las Heras, presidente de la comisión técnica en la que se ha debatido este asunto y vocal de ARAG-Asaja. «Y podíamos poner en peligro ese acuerdo» de normas para esta próxima vendimia «cuando hay aspectos positivos como un mayor control de la masa vegetal o una mejora de la Ley de la Cadena Alimentaria». Con todo, Las Heras ha dejado clara la postura de su organización que es llevar a destilación ese 5% de excedente de transformación porque «no se puede limitar la transformación amparada y destruir producción con dinero público y, al mismo tiempo, no cerrar» la otra puerta para producir vino de mesa, a través de la transformación.

Con lo que será en próximas comisiones técnicas cuando «se siga debatiendo», dijo Las Heras, «y tratando de avanzar en la eliminación del vino de mesa en Rioja». Pero no llegará antes de la vendimia del próximo año y, además, ese compromiso habría que incluirlo en las normas de campaña de 2025. Roberto Salinas, representante de UAGR, ha criticado que «algunas organizaciones agrarias se han puesto de perfil. Y la situación es muy delicada porque el próximo año no habrá ya ayudas públicas a la destilación y muchos agricultores lo vamos a pasar mal».