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De noviembre de 2023 a marzo de 2024. Cuatro meses sobre el calendario… un visto y no visto en el CCR. Así que si es usted de los que ha podido contemplarla en algún momento durante ese tiempo, puede considerarse afortunado. Si no lo ha hecho, tendrá que esperar a una próxima vez. Y, por el momento, no hay fecha prevista.
La conocida popularmente como 'calesa de Alfonso XIII' ya no está en el Centro de la Cultura del Rioja. El coche de caballos con el que Logroño agasajó al rey en su visita del 14 de octubre de 1925 ha dejado de ser expuesto en tales dependencias y, aunque se le busca nueva ubicación, aún no hay nada claro.
Lo único que se sabe con certeza es que el Ayuntamiento, de la misma manera que la puso, la ha quitado. Y ello tras varios mandatos buscando la forma de dar salida a los bienes históricos de los almacenes municipales para recuperar y recolocar algunos de ellos, como es el caso. Sea como fuere, el sitio en que inicialmente se pensó ya no es tal.
Su aparición en noviembre de 2023, de la noche a la mañana y en sitio tan insospechado, sorprendió a propios y extraños, sobre todo a los primeros. De ello dio buena cuenta Diario LA RIOJA, arrojando además luz sobre la verdadera historia de la comentada «carroza».
Su desaparición, ya a finales de marzo de este 2024, también se produjo sin aviso, aunque no ha pasado desapercibida para este periódico, que se ha interesado por el paradero del 'landó' del siglo XIX. Y es que el mismo ha sido devuelto al Parque Municipal de Servicios porque el espacio que ocupaba tras la reapertura del CCR ha sido amueblado recientemente para uso del propio Centro de la Cultura del Rioja.
Así, habría sido la llegada del mobiliario pendiente el que ha obligado al desalojo de la estancia y, por tanto, a dejar en provisional el paso de la calesa de Alfonso XIII, uno de los referentes durante años en los reportajes que cada cierto tiempo se publican sobre «esa ciudad dentro de la ciudad» en la que se ha convertido el depósito local.
Ya entonces hubo quien se cuestionó que el CCR fuese el emplazamiento más adecuado, y apenas cuatro meses parecen haberles dado la razón. «Se busca otra ubicación porque la idea era y es su exposición», confirman fuentes oficiales del propio gobierno local en relación al «coche de ciudad de lujo con capote abatible detrás de cada uno de sus asientos» y a su viaje de ida y vuelta al recinto de Pradoviejo.
«Calesa del siglo XIX tapizada en terciopelo rojo; con el escudo de Logroño grabado en la puerta, propiedad del Ayuntamiento», puede leerse en la ficha descriptiva basada en el inventario de la propia Administración local. Una calesa que, sin embargo, no es tal, sino que se trata de un landó, un tipo de carruaje cubierto de cuatro ruedas que, entre los coches de caballos, era un vehículo sumamente cómodo y considerado, por tanto, de lujo.
Y todo apunta, aunque hay diferentes versiones, que el mismo era el «coche del alcalde» o coche oficial del Consistorio cuando el decimotercero de los 'Alfonsos' visitó Logroño por segunda vez y no un vehículo que fuese adquirido 'ex profeso' para tan ilustre visitante. El rey en cuestión, según las crónicas de esta misma casa, fue pasajero «del 'landeau' tirado por dos briosos caballos alazanes que le ofreció el alcalde» apenas un momento, un visto y no visto como su más reciente salida, que se ha quedado en amago.
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Javier Campos y Justo Rodríguez | Logroño
Juan Cano, Sara I. Belled y Clara Privé
Alfonso Torices (texto) | Madrid y Clara Privé (gráficos) | Santander
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