Se vende pórtico antiguo de La Villanueva en Wallapop

No era un producto cualquiera y, como era de esperar, no tardó en llamar la atención. De hecho, fue una cuenta vecinal como es la del Observatorio del Casco Antiguo de Logroño la que dio la voz de alarma. «Sabías que puedes comprar un pedazo del Casco Antiguo de Logroño por Wallapop?», difundía a través de redes sociales. «Sí, los sillares del número 5 de la calle La Brava se venden después de que el Ayuntamiento de Logroño remodelara la plaza el enero pasado», precisaban a la vez que se preguntaban si «los vende el contratista» o «se los dio el Ayuntamiento».

El anuncio en cuestión, que fue retirado ayer, publicitaba «piedra de segunda mano» en «buen estado». «Se vende el despiece de este pórtico completo», se añadía mostrando el producto con hasta tres fotos, añadiendo la posibilidad de envío a un precio que, eso sí, conducía a equívoco. Un euro por… ¿cada centímetros cúbico? (en medidas figuraba un centímetro de ancho, uno de fondo y otro de alto), aunque posteriormente hablaba de una entrega en 3-7 días «desde 14,49 euros en un punto de recogida» y «desde 16,49 euros en mi dirección».

Sea como fuere, que todo un pórtico desmontado con motivo de unas obras municipales (y que durante años sirvió de muro a un aparcamiento provisional) estuviese en la popular plataforma dedicada a la compraventa de productos de segunda mano entre usuarios a través de Internet no ha pasado desapercibido para nadie, tampoco para el propio Ayuntamiento, que ayer daba comienzo a sus propias indagaciones para tratar de esclarecer cómo habían llegado tales piedras «hasta ahí».

«Consultados los técnicos municipales, pues la reforma de la plaza se remonta al mandato anterior, se nos ha informado de que se determinó que el pórtico, la piedra de sillería en concreto, no tenía un especial valor, por lo que se determinó que la adjudicataria de la obra lo desmontase y lo llevase a un punto de recogida –limpio– autorizado –de residuos de construcción–; eso fue lo que nos dice Antis que hizo, desconociendo que ha podido pasar a partir de ese momento», ha explicado a Diario LARIOJA el concejal de Arquitectura y Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Logroño, Íñigo López-Araquistáin.

De entrada, desde la Administración local, y siempre según el edil delegado, se ha encargado un «informe interno» para determinar lo sucedido a la vez que ya se piensa en la elaboración de un protocolo para que determinadas piezas como tales sillares, con independencia de que arqueológicamente se concluya que no tienen valor para su preservación, no aparezcan como éstos dada su condición de material sensible.

Al respecto, desde el Consistorio capitalino también se ha comprobado cómo el vendedor del pórtico publicitaba otros materiales, como unas vallas y unos adoquines, «se piensa que de las últimas obras en María Zambrano con motivo de la ejecución del carril bici», y un banco como los que pueden verse en cualquier espacio público de la ciudad.

«Esperemos que el informe interno nos sirva para saber qué ha podido pasar, es decir, que un material que se retira y no se decide guardar en el Parque de Servicios (y repito que durante el anterior mandato) aparezca a la venta en Internet. Y, sobre todo, y habida cuenta de que era material desechado según lo acordado por los técnicos y el arqueólogo que supervisó los trabajos, nuestra intención es dotarnos de un protocolo para que no se vuelva a repetir y más con elementos sensibles», añade López-Araquistáin.

El pórtico del hoy desaparecido número 5 de la calle La Brava fue retirado durante la reurbanización de La Villanueva, concretamente de la plaza entre la citada vía y El Horno, posteriormente bautizada con el nombre de plaza Cofradía del Vino. Sí que se dejaron elementos similares en el 7 y el 9, aunque en su caso formando parte de una parcela de titularidad pública.

La reforma integral de las calles La Brava y El Horno en el Casco Antiguo, junto al espacio resultante entre ambas, fue uno de los proyectos heredados cuya ejecución dio comienzo en el verano de 2023 desarrollándose según lo previsto. Así, se daba continuidad a los trabajos ya realizados en las calles Hospital Viejo y Los Yerros y de esa manera se presentó retirados los obreros, la maquinaria... y el pórtico. El mismo que ahora es noticia.

Todas las intervenciones formaban parte de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi), que se ejecuta en las conocidas como 'siete calles' con fondos europeos.

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