El nudo de Vara de Rey, al menos en la parte en la que la calle del mismo nombre conecta con Duques de Nájera y la nueva Miguel Delibes, comienza a parecerse a lo que será: una intersección de calzadas. Así, el color negro ya ... se ve en las mismas fruto de la capa de imprimación asfáltica sobre la zahorra nivelada donde antes estaba el desaparecido túnel.
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Se trata del paso previo para comenzar con el asfaltado propiamente dicho, trabajos que están previstos que empiecen este mismo lunes. El denominado riego de imprimación de los hasta ahora caminos de tierra alisados durante días pasados por grandes apisonadoras darán paso a varias capas de aglomerado, entre las que se extenderá una nueva capa de adherencia.
El Ayuntamiento prevé reabrir al tráfico rodado el paso entre Duques de Nájera y Vara de Rey «en la primera quincena de noviembre» -que seguirá cortada a la altura del puente sobre el cajón ferroviario-. Y por ello se avanza a fin de poner en servicio la mitad del nudo, es decir, la 'T' que posibilite la circulación hacia el centro dando continuidad al eje oeste este por el tramo de Miguel Delibes hasta Hermanos Hircio.
Las obras de Vara de Rey continúan a ritmo rápido. En la mañana de este viernes, un camión con imprimación asfáltica (capa impermeable previa a la llegada del asfalto) se han encargado de tintar de negro los hasta ahora caminos de tierra que, an las últimas jornadas, las apisonadoras habían dejado completamente nivelados.
Este viernes se ha dado un paso más y el futuro diseño de Duques de Nájera ya comienza a parecer lo que será: una calzada. El color negro ha sido el protagonista. A las 10.00 horas todavía imperaba el marrón de la tierra, el tono que durante los últimos meses ha dominado el polémico cruce. Poco después, el negro de una disolución líquida ya mandaba en la zona. Se trata de un primer paso porque queda por echar la brea asfáltica, asentar, pintar las rayas... Pero se suma al de que los peatones ya puedan circular por las nuevas y anchas aceras de Vara de Rey y Duques de Nájera desde hace unos días.
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De momento, el trasiego de los trabajadores sigue, con su coreografía de lanzamiento de baldosas, y también el de la maquinaria. El tiempo corre. El Ayuntamiento se comprometió a que la mitad del paso estaría operativo en noviembre. Restan unas pocas semanas y aún queda mucho por hacer aunque el polémico nudo comienza a desenredarse.
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