La subestación de Cascajos, que ya funciona, liberará en primavera el suelo para la doble calzada de Miguel Delibes

Llegó en abril de 2022 y este jueves, 23 de enero de 2025, se ha ido tal y como vino, sobre ruedas (las de un gran camión). La marcha de la subestación móvil y provisional, retirada tras más de dos años y medio de servicio mientras se ha construido la nueva y soterrada instalación eléctrica de Iberdrola en Cascajos (desde principios de 2022), es la prueba de que la obra encara ya su última fase, la del cerramiento, y todo ello después de que la misma ya esté en funcionamiento (de ahí la retirada de la otra).

Así lo han precisado esta mañana el concejal de Energía (Ciudad circular, Movilidad, Transporte y Eficiencia Energética), Ángel Andrés, y el delegado de Iberdrola en La Rioja, Carlos Sobrino, que han visitado las obras en Marqués de Larios para dar cuenta de que en primavera quedarán liberados los terrenos aledaños a la dotación, lo que hará posible que el Ayuntamiento de Logroño no solo mejore el entorno, sino que por fin complete la doble calzada de Miguel Delibes, pasando de dos a cuatro carriles frente a la estación de autobuses este mismo año.

«Continuamos avanzando en el entorno del soterramiento y completando aquellas actuaciones que quedaban pendientes para que este espacio pueda ser ganado para la ciudad de Logroño, todo ello sin dejar de prestar el servicio energético necesario a la zona», ha explicado el edil dando cuenta de que «la finalización del proyecto de nueva subestación permitirá, además, completar la urbanización de la calle Miguel Delibes y mejorar su entorno».

Andrés ha recordado que «Iberdrola cederá gratuitamente al Ayuntamiento la parcela liberada tras la finalización de las obras; parte para uso de viales, en una primera fase, y parte para espacio libre público». Así, una vez que ha entrado en funcionamiento la subestación definitiva y se ha retirado la provisional, «faltaría retirar el vallado de obra y realizar el cerramiento y acondicionamiento de la parcela, de forma que la cesión del nuevo espacio a la ciudad está prevista para primavera».

«Cuando el Ayuntamiento disponga de la parcela liberada, se desarrollará el proyecto de mejora de la zona, cuyas obras cuentan con un presupuesto de 300.000 euros y pretenden mejorar la seguridad vial del entorno y habilitar nuevas áreas de esparcimiento», ha explicado.

De entrada, el Consistorio capitalino prevé completar la doble calzada en Miguel Delibes, dando continuidad a la que ya puede verse desde el cruce de Vara de Rey y que queda interrumpida tras la intersección con Hermanos Hircio (dos carriles más hasta la rotonda entre estaciones de Colón-Bécquer), «lo que mejorará la movilidad, el flujo de tráfico rodado en la zona y de los viandantes con la colocación de un nuevo paso de peatones en dicha calle».

Posteriormente, «el Ayuntamiento mejorará la seguridad del entorno para garantizar un tránsito óptimo de peatones y vehículos. Todo ello se unirá a las actuaciones de mejora en materia de seguridad vial en torno a la nueva estación de autobuses en las que ya se trabaja, previstas para otoño, que contemplan la incorporación de elementos inteligentes de señalización que mejoran la información, tanto de conductores de autobús como de peatones en la entrada y la salida de la estación, así como otras actuaciones de señales luminosas y sonoras en la vía y la habilitación de un carril exclusivo para autobuses y taxis en avenida Colón».

También, según Andrés, «en el suelo cedido, se habilitará un nuevo parque y zona de esparcimiento para la ciudad, en el que se instalarán áreas verdes y mobiliario para la estancia y disfrute de los vecinos». La idea del gobierno local, ha expresado, «es que se convierta en un parque de bienvenida y entrada a los viajeros que llegan a la estación, con lo que se buscará innovación y contemporaneidad en su diseño». A su juicio, «se trata de embellecer toda la zona, dotando al barrio y a la ciudad de nuevos espacios de encuentro al aire libre, a la vez que mejoramos la imagen de nuestra ciudad», por lo que se piensa en incluso en un posible concurso de ideas.

«La nueva subestación, con todos los equipos soterrados y la utilización de las últimas tecnologías disponibles en el sector eléctrico, va a mejorar la seguridad y la calidad de suministro, con una especial atención a su perfecta integración urbanística», ha destacado el delegado de la compañía en La Rioja, quien ha puesto en valor el salto de calidad con una infraestructura que ha tenido un coste de 5.895.533 euros más IVA, de los que Iberdrola participa en los costes de ejecución con 1.500.000 euros más IVA, por lo que el importe que el Ayuntamiento de Logroño ha aportado es de 4.395.533 euros, también más IVA.

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