«Estamos siguiendo los pasos precisos para rescindir, mejorar lo hecho y licitar lo que queda»

«Desde el Ayuntamiento de Logroño se están siguiendo los pasos precisos para resolver el problema: rescisión de contrato, intervención de urgencia para mejorar lo hecho y licitación de lo que queda del proyecto, en el cual ya se trabaja», precisa la concejala de Economía y Hacienda, Esmeralda Campos, quien reitera que el proceso es «complejo», precisa que «las prisas no son buenas consejeras», y aclara que, pese a la intención inicial de adecentar la zona con recursos propios, «la asesoría jurídica ha entendido que para hacerlo antes había que resolver el actual contrato».

La situación es que, ahora, y a la espera de que Cotodisa se pronuncie en los próximos 10 días, nadie se atreve a dar un nuevo plazo para acometer las reparaciones necesarias relacionadas con la seguridad y la accesibilidad en lo ya hecho... ni mucho menos para sacar a concurso lo que queda. No en vano, dependiendo de la respuesta de la empresa –quien ya pidió una ampliación del plazo de ejecución y la tramitación de un modificado del proyecto siéndole denegado–, tal resolución podría acabar ante el Consejo Consultivo de La Rioja.

Por tanto, habrá que esperar para ver la posición de la empresa que, de momento, sigue siendo responsable del espacio público objeto de remodelación. «El incumplimiento de los hitos parciales y la imposibilidad de cumplir el plazo general» es un hecho, a juicio de Campos, quien sostiene que, al menos de momento, el Ayuntamiento no se plantea el escenario de no acabar las obras a 31 de diciembre de 2023 –fecha para justificar los trabajos y acceder a la totalidad de los fondos europeos obtenidos–.