La 'madre de todas las ferias' entra en escena

Ibon Arakistain fue el encargado de romper el silencio y el responsable de una frase que ha calado. «La madre de todas las ferias», decía para referirse a San Mateo. Lo cierto es que San Mateo no llega al esplendor de las diez tardes de otros años, pero sus ocho jornadas, con veinticuatro partidos, le convierten un una feria única. San Fermín está a a su altura en volumen, si bien el hecho de que el torneo logroñés sea el último del verano parece concederlo un aura especial. Para algunos supone salvar esta agitada época estival; para otros, confirmar sus buenos meses de verano.

La pelota riojana aspiraba a tener presencia en el torneo y la tendrá. Este año será Darío Gómez el que pelee por el triunfo. Junto a él, José Javier Zabaleta, uno de los mejores zagueros del cuadro.Aspe y Baiko presentan seis parejas clásicas, pero novedosas, equilibradas y que, sin embargo, presentan la duda del concurso de Unai Laso, que está pendiente de su estado físico. Este jueves se mostraba optimista acerca de su concurso, aunque no lo garantizaba. No hay mezcla de pelotaris. «No lo hemos considerado oportuno», resumía Inaxio Errandonea, uno de los responsables de Aspe.

Laso, uno de los pelotaris de moda, jugará junto a Jon Ander Albisu, zaguero de oficio. Es una de las tres parejas del Grupo B, en las que también están Jaka y Mariezkurrena, también de Baiko, y Ezkurdia y Rezusta, pareja de Aspe de tremendo potencial. En el grupo A, Darío y Zabaleta jugarán contra Urrutikoetxea e Imaz, rivales rocosos, el domingo, en el primer día de la feria, y contra Altuna y Martija, que disfrutarán de un nuevo emparejamiento. La buena noticia para el aficionado es que el delantero de Amézqueta jugará este domingo en Fuenterrabia, lo que significa que ha dejado atrás sus problemas físicos.

La feria en sí arrancará el domingo 18 de septiembre y concluirá el 25. Ocho tardes, si bien la del sábado se reserva para el Desafío del vino, que supone un respiro para las seis parejas que toman parte en el torneo. Darío estará escoltado en la feria por Víctor Esteban, Rubén Salaverri y Javier Zabala, presentes en los partidos de complemento.

«El Adarraga será el epicentro de la pelota», decía Pedro Uruñuela, consejero de Deportes. San Mateo siempre ha sido un feria diferente, si bien este año tiene ese enorme componente emotivo de romper con el pasado más reciente. «Contar con ocho festivales supone volver a la época prepandemia. La mejor noticia es disfrutar en condiciones de normalidad de la feria», añadía. En el se rendirá homenaje a agentes forestales y bomberos, a los que el Gobierno ha cedido uno de sus palcos, y, por otro lado, se estrenarán vestuarios.

La ruta de Darío queda definida. Abrirá la feria el domingo, ante Urrutikoetxea y Imaz. Si pierde, el martes se medirá a Altuna y Martija; si lo gana, los adversarios serán los mismos, pero el jueves. El pelaire tiene la oportunidad de jugar con un zaguero de absoluta garantía después de muchos años moviéndose en paridos de Segunda, como el mismo admitió. El salto, ganado a pulso, es enorme. De hecho, hace un año, en plena feria matea, admitía no saber cuál sería su futuro en este deporte. Poco después renovaba.

Ahora bien, San Mateo no se reduce a esos estelares y a la final, sino que va más allá. Para el aficionado riojano, Víctor Esteban jugará el lunes junto a Tolosa, el jueves con Arbizu como compañero y el domingo 25 de septiembre, día de la final, con Gaskue; Zabala lo hará el miércoles, también junto a Tolosa, y el sábado, día reservado para el Desafío, aunque aún no se conoce la composición del estelar; Salaverri, que estará en el primer día de feria, repetirá el jueves y el último domingo con Alberdi.