Los carteles de San Mateo: una despedida, una baja, Urdiales y Roca Rey

Cuatro son las tardes en las que los aficionados se podrán acercar a la plaza de La Ribera para celebrar, como cada San Mateo, su cita con la tauromaquia. El serial cuenta mayor número de abonados, otro año más, en el tendido dirigido a la juventud así como en el general.

La feria exhibe suficientes alicientes para asistir al coso todas y cada una de las tardes. Entre ellas, la que permitirá disfrutar de la veteranía de Pablo Hermoso de Mendoza en una tarde en la que las emociones van a estar a flor de piel. Pablo Hermoso es torero de Logroño y La Ribera ha sido una de sus plazas talismán. Pero es que, además, en el toreo a pie los aficionados se citan desde con Diego Urdiales o Miguel Ángel Perera a la presencia de Borja Jiménez, uno de los toreros revelación de la actual temporada; la participación de los astados de Fuente Ymbro aportan interés a un abono que, no obstante, ha sufrido la baja de uno de los toreros más esperados: Morante de la Puebla. A pesar de ello y de la dificultad que supone encontrar un sustituto parejo, la feria, aunque corta, anuncia a los toreros más demandados del momento que han sumado triunfos en prácticamente todas las ferias.

Abre cartel Miguel Ángel Perera. El diestro extremeño celebra sus veinte años de alternativa y es un espada que en Logroño ha firmado momentos de muchísima intensidad como en aquel recordado 2008 en el que estuvo anunciado en una corrida y acabó toreando tres. En esta ocasión, el pacense llega a Logroño después de haber abierto por primera vez en su carrera la Puerta del Príncipe de Sevilla.

En segundo lugar actuará Daniel Luque, un torero que se encuentra en un momento extraordinario y que ve opciones a prácticamente todos los toros que sortea. El espada de Gerena, entre otros triunfos, ha salido a hombros en Sevilla, Gijón o Dax. Suena cierto runrún en los mentideros taurinos con la presencia del coletudo andaluz porque, si le ayuda alguno de sus toros, puede ofrecer una gran tarde.

El más novel de la terna es Borja Jiménez, que lleva una temporada arrolladora. Está anunciado en todas las ferias y allá dónde va, triunfa. Sin ir más lejos, esta temporada ha descerrajado la puerta grande de la plaza de Las Ventas. Y no pudo salir a hombros por la Puerta del Encierro de Pamplona porque resultó cogido. Sin duda, un torero que apetece ver.

Para la ocasión, que se antoja que sea una tarde especial, se han reseñado toros de Pallarés, un hierro poco habitual en los festejos de rejones y que tiene procedencia Santa Coloma.

Hablar de Pablo Hermoso de Mendoza en Logroño es hacerlo de tardes importantísimas en la carrera del rejoneador estellés. Sin duda, por la carga emotiva, la de esta feria va a ser otra de las citas logroñesas que Hermoso, que ha hecho todo en el toreo y en todos los cosos, guardará con gran cariño en su historia taurina.

Guillermo Hermoso de Mendoza también vivirá una tarde especial junto a su padre, pero el disfrute no es para él sino para su primogénito. El joven jinete finaliza su gran temporada en Logroño, una campaña que le ha llevado a triunfar en cosos de la relevancia de Madrid o la plaza de toros de Pamplona. Dos toreros a caballo, padre e hijo, en dos momentos muy diferentes. Uno dice y adiós mientras el otro, con la hierba en la boca, tiene sed de triunfo.

La corrida de Juan Pedro Domecq tiene sobre ella una incógnita difícil de despejar. El cartel nació siendo una combinación redonda con Morante de la Puebla, Diego Urdiales y Alejandro Talavante pero el diestro de la Puebla del Río anunció hace unos días un parón en su temporada por problemas de salud que viene arrastrando buena parte de su actual campaña. Ante esta situación la empresa propietaria de La Ribera, BMF, tiene en el horizonte una papeleta de complicada solución. Muchas son las opciones: que se quede en un mano a mano entre Urdiales y Talavante, la presencia de Castella, Tomás Rufo, Fernando Adrián o Ginés Marín; el doblete de Borja Jiménez o Emilio de Justo para sustituir al genio cigarrero o, incluso, la despedida de Ponce, que declinó pasar por Logroño cuando se confeccionaron los carteles. La realidad es que la empresa no deja de decir que hay que esperar y en ello está la afición. Con todo, la presencia de Diego Urdiales en sus bodas de plata de alternativa y triunfador de la feria del año pasado es por sí todo un aliciente. Además hay que sumar la figura de Alejandro Talavante, un espada del que siempre se espera lo mejor y que hace unos días indultó un toro de 'El Capea' en Villanueva del Arzobispo. Dos toreros que no defraudan y tal vez un tercero por concretar. Una incógnita que se despejará, como viene siendo habitual, al finalizar la anterior corrida de a pie.

Los toros de Fuente Ymbro, ganadería triunfadora de Pamplona en la pasada Feria del Toro, serán los encargados de poner el punto final al serial mateo. El cartel cuenta con un tremendo atractivo ya que en una misma tarde se va a poder disfrutar el toreo a distinta velocidad. Por un lado el ralentí que sirve de denominador común de dos toreros artistas como son Pablo Aguado y Juan Ortega. Por otro lado, la adrenalina del concepto de Roca Rey que no se deja nada en el tintero. Estos ingredientes hacen que la última tarde de feria en La Ribera sea un auténtico cóctel de distintas tauromaquias.

El más veterano del paseíllo es Juan Ortega, que fue alumno de la Escuela Taurina de Camas, y del que dicen que en sus muñecas atesora la capacidad de parar el tiempo. También torea especialmente despacio Pablo Aguado cuyo corazón torero atesora el don del temple. Tanto Ortega como Aguado son nombres habituales en los abonos de prácticamente todas las ferias. Y entre torero artista y torero artista actuará Roca Rey, el diestro que traspasa las fronteras de lo taurino y que hace que la tauromaquia forme parte de la vida social de nuestro país. El peruano suma apéndices prácticamente a diario y además es, sin duda, el espada más taquillero del escalafón. Todos conocen a Roca Rey, todos quieren hacerse una foto con él y eso se nota en los tendidos. A buen seguro el fin de feria no dejará a nadie indiferente porque la última promete ser una tarde de emociones, en la que los tendidos registrarán una gran entrada con rostros especialmente jóvenes.

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