El alcalde de Logroño cree que se está siendo injusto con la juventud al poner el acento solo en el botellón

El alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza, ha vuelto a referirse este lunes al botellón que cada fin de semana se registra en el parque del Ebro, agrandado estos días por las fiestas de San Mateo, saliendo de nuevo en defensa de la juventud.

Una juventud que, según sus palabras, «es una juventud tremendamente responsable, que festeja con normalidad cuando se ponen en esas edades, 16, 18 o 20 años, después de los toques de queda, las restricciones y los límites, no habiendo podido hacer una vida normal cuando eran los que menos riesgos tenían de ser hospitalizados o de enfermar».

Hermoso de Mendoza, preguntado y repreguntado por los periodistas, se ha mantenido en la misma línea que todo este verano. «Creo que la juventud se ha divertido este fin de semana, que ha podido disfrutar. La gente ha querido festejar y, en esta coyuntura donde está cerrado el ocio nocturno, fueron al parque del Ebro como ha venido pasando en pasados fines de semana sin incidencias graves... han estado allí y han podido disfrutar».

El primer edil logroñés ha destacado que «lo mejor» es que no ha habido ningún altercado y confía en que la situación se vaya normalizando «a partir de ya», pues la apertura del ocio nocturno está prevista en La Rioja para el 1 de octubre, y espera que la situación al respecto vuelva a ser la de antes de la pandemia este otoño-invierno.

Hermoso ha hecho, además, un balance «positivo» de este primer fin de semana de sanmateos. «Mucha gente se ha acercado a Logroño, como hemos podido ver, y se ha visto la alegría, la fiesta y el bullicio, de la gente joven y de la mayor», ha sentenciado.

Un fin de semana que, a su juicio, «se ha desarrollado sin incidencias y con algunas actividades con mucho público»; un fin de semana, en definitiva, «vivido con normalidad que era lo que se pretendía con estos sanmateos anómalos», la vuelta, en cierto modo, a esa normalidad.