
Ver fotos
Secciones
Servicios
Destacamos
Ver fotos
¿Pero no habían acabado las fiestas? Esto debe ser un final por partes y aún le quedan varios capítulos. Estamos agotando el de las degustaciones y chuletas que, por los pelos no salen remojadas, y aún hoy habrá conciertos, tik-tok... y demás.
Por lo que a lo sucedido en la calle Colón esta mañana de sábado, quien ha resistido el embate de las cuatro gotas de media mañana ha ganado. Claro que no es igual aguantar cuando uno ha puesto la carpita que cuando ha de plantar la mesa a la intemperie, que de todo ha habido, aunque el personal acude a estas citas de lo más preparado.
Con provisiones como si nos fueran a enclaustrar de nuevo, los grupos han ido cogiendo, además, lo suyo porque la Federación de Peñas, organizadora con el Ayuntamiento, daba por cada inscripción chuletillas de cordero, sarmientos, una parrilla, pan, vino y cuatro vasos de barro.
En total, 120 mesas a razón de cuatro personas por mesa. En teoría, pero, en la práctica, lo de cuatro por mesa se puede multiplicar por todos los que quepan si nos apretamos y, si no, nos quedamos de pie. Una ensaladita de tomate para arrancar no tiene rival. Lógico. Pero puestos a sumar elementos, los había con tirador de cañas. A todo confort.
Mientras, los expertos en asar, que cada grupo tiene el suyo, hincando el riñón. Y catando que las cosas queden como tienen que quedar, que, si no, luego, a los otros, hay que oírlos. El ratillo de chirimiri ha venido a complicarlo todo un poco, pero las ascuas han aguantado.
Quien no recuerda, o le han contado, estas mismas farras en aquellos otros años remotos, que hablamos del siglo pasado, cuando los hermanos de unos o los primos de otros competían allí mismo por hacer unas chuletas más ricas que los de enfrente y encima ganaban.
Todo esto, en Colón porque durante esta mañana de sábado la calle ha estado cerrada al tráfico desde Duquesa de la Victoria a Solidaridad, con una calzada dividida en las correspondientes parcelas y, en cada una de ellas, una chapa sobre la que encender las hogueras.
Ha habido momentos y tramos de humaredas más que notables, que la tenue lluvia ha venido a suavizar, y a los participantes, aunque les dará igual porque para eso lo han gozado, les quedará su buen trabajo para quitarse el olor de tanto humo. Dará gusto cómo habrán quedado las cortinas de los vecinos. Un día es un día ¿no?
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Terelu repetirá en el Zorrilla tras aplaudir el público en pie su debut en el teatro
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Destacados
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.