Recogida selectiva en Logroño

Esos residuos en plena calle

Eso sí, cuando pasen estos días, habrá cambio de horas prefijadas. El edil está de conversaciones con las partes para concretar las próximas directrices. Si bien la mayor parte de los profesionales de los establecimientos de este entorno cumplen adecuadamente con la fórmula adoptada, «las malas actuaciones de unos pocos hacen que parezca que el sistema funciona de pena», de manera que se van a poner en marcha retoques cuyo incumplimiento, ya a estas alturas, dará lugar a sanciones.

No les deja de pasar que no se pone cuidado a la hora de separar residuos y que acaban unos con otros mezclados, de forma que en la planta a la que se llevan se rechaza y se ha de pagar una penalización. «Un dispositivo diseñado prácticamente a la carta, nos cuesta dinero por gente que no se implica», se queja el concejal. O que se sacan los restos a deshoras. O que no se pliegan los cartones. O que no se barre la terraza después del cierre, aunque sea de forma somera, de manera que luego los restos se quedan entre los de la recogida y los operarios se llevan los efectos de reciclaje, pero ahí queda los otros, los que han permanecido debajo de estos.

En cualquier caso, aunque precise mejoras, el edil sostiene que esta fórmula de recogida selectiva puerta a puerta en los distintos establecimientos del centro histórico ha servido para retirar miles de kilos. De materia orgánica han sido más de mil kilos al día desde la puesta en marcha del servicio, allá por el mes de octubre, con picos por arriba, en diciembre, con más de 1.300, y por abajo, en enero, de 991.

En papel y cartón, los números son más modestos y superan los 200 kilos al mes, también con pico en diciembre, de 334 kilos al día.

De los envases, solo se dispone de los datos de este mes de marzo –hasta el día 19–, dado que ahora ya se llevan los envases a las instalaciones de Logroño Limpio mientras que, hasta ahora, iban a la planta de reciclaje. En los 19 primeros días de marzo se han retirado 3.590 kilos, a razón de 189 kilos al día.

Ayuntamiento y hosteleros del centro histórico llegaron a un acuerdo para recoger, desde el pasado octubre y de forma selectiva, los residuos generados por su actividad por el sistema de puerta a puerta.

La mecánica que se puso en marcha coloca, a determinadas horas, un cubo marrón para residuos orgánicos en al puerta de los locales cuyo vaciado se pactó entre las 06.00 y las 09.00 y de las 16.00 a 20.00 horas para atender tanto los residuos resultantes de las comidas como de las cenas. Y también se acordó dejar el cartón delante de los establecimientos para llevarlo de ahí entre las 09.00h y las 12.30 horas.

Desde aquella primera puesta en marcha, se han mantenido más encuentros para tratar de engrasar mejor el sistema y ahora se plantea cambiar horarios.