Borrar
La vicepresidenta de la asociación, Amaya Gómez, en la plaza La Estrella, cuyo suelo necesita una renovación a fondo y un buen repaso de limpieza. Sonia Tercero
Patio de vecinos | A.V. La Estrella

Residir en el pueblo sin nombre

Tranquilidad sin denominación | El histórico barrio logroñés pide más renovación de servicios mientras reclama que su nombre figure en las señales indicativas

Nuria Alonso

Logroño

Lunes, 11 de noviembre 2024, 07:12

Junto al mastodóntico e inagotable vecino mudo que es el hospital San Pedro, el vecindario de La Estrella goza de los parabienes de residir en un pueblo, con las ventajas de estar en la ciudad en un pispás. Así lo disfrutan sus vecinos, unos 2.400, en cálculos de Amaya Gómez, la vicepresidenta y bibliotecaria de su asociación de vecinos que, además de una actualización de servicios, clama por un reconocimiento como barrio, uno de los históricos de la ciudad que, no obstante, no tiene reflejo en ninguna señal ni cartel salvo en la memoria de sus residentes.

– ¿Qué es lo mejor de vivir en esta zona?

– Es como vivir en un pueblo. La mayoría de los vecinos nos conocemos. Y destacaría también la tranquilidad, porque es un barrio muy pacífico.

La Estrella

  • Servicios. Un colegio de Infantil y Primaria, el Pío X, dos guarderías, una farmacia, un tanatorio (San José), un centro de día y otro de servicios sociales y dos residencias de mayores.

  • Salud. Un consultorio, el hospital San Pedro y la clínica Valvanera.

  • Comercio. Un supermercado medio y varios locales de proximidad.

  • Parques. Tres zonas verdes con área infantil.

– ¿Y lo peor, lo que más críticas genera entre los vecinos?

– El tráfico y la calle Piqueras, que divide al barrio: está la mitad en un lado y la mitad en otro. Y aunque nos han quitado el tránsito de los camiones y hemos ganado en seguridad vial, seguimos con el constante sonido de las ambulancias, aunque nos hemos terminado acostumbrando. Ya son como un vecino más.

– Plantee tres reivindicaciones para su barrio, las necesidades más apremiantes.

– El ambulatorio necesita una ampliación de, como mínimo, un médico más. Tenemos una médica de cabecera y una enfermera. Luego, nos hacen analíticas dos días a la semana, miércoles y viernes, que antes era solamente los miércoles. Pero el barrio, sobre todo ahora con las casas nuevas, va a más. Calculamos que el barrio tiene una población cercana a los 2.400 habitantes, desde la circunvalación hacia aquí. Y eso que originariamente La Estrella comprendía también el polígono industrial de Cascajos... Pero no sólo es limitado el servicio, sino también el local físico, que se ha quedado pequeño.

También, el servicio bancario, especialmente mirando a los mayores, que tienen que bajar a Cascajos o al centro para sus gestiones. Antes sí que teníamos varias oficinas bancarias, ahora sólo queda un cajero de Caixabank y, claro, con toda la gente que viene por el barrio, que pasa por el San Pedro, por el tanatorio, Valvanera, de los pueblos cercanos..., muchas veces se queda sin dinero y es insuficiente claramente.

Y luego, teniendo en cuenta toda la gente que viene por el barrio y que está el hospital San Pedro, tendría que mejorarse la limpieza, que se haga una limpieza más detallada. No pedimos que baldeen igual ni que pasen las mismas máquinas que por la Gran Vía, que es el centro. Pero aquí nos podemos tirar quince días sin que retiren la basura de las papeleras.

– ¿Y qué le sobra a la zona?

– El tráfico. El tráfico y, en algunos sitios, el ruido.

– ¿Alguna demanda histórica que nunca haya sido atendida?

– Que marquen claramente los límites del barrio y que nos reconozcan en condiciones.

8.000 ejemplares

dispone la biblioteca de la asociación de vecinos, que gestiona la propia Amaya Gómez, de forma voluntaria y altruista, para uso y disfrute de los vecinos del barrio.

– ¿Qué le pide a los vecinos de su zona?

– Armonía, reivindicaciones y apoyo a la asociación de vecinos. Involucrarse más. A ver, si hay que movilizarse para reivindicaciones, la gente se apunta, pero a veces es complicado.

– ¿Y al Ayuntamiento?

– Que mire por el telescopio, a a ver si encuentra alguna señal que indique 'Barrio La Estrella'. Hay gente que no sabe que esto es un barrio, que no cae hasta que les dices 'Hospital San Pedro', que todos conocen porque lamentablemente es un sitio por el que tarde o temprano todo el mundo pasa.

– ¿Es un buen lugar para los niños, los jóvenes y los mayores?

– Es muy buen lugar para niños, jóvenes y mayores. Es perfecto porque es muy tranquilo. Tenemos tres parques y eso que hay pocos niños porque el barrio está envejeciendo. Tenemos una biblioteca en la asociación, con más de ocho mil ejemplares; hay un grupo de batucada; hay un centro municipal de servicios sociales con un equipo de dinamización infantil, que cogen a los niños, les dan apoyo escolar, hacen juegos, preparan actividades como Halloween...

Al ser una zona tranquila, los mayores tienen espacio para pasear, sentarse, conversar... De hecho, hay dos residencias y un centro de día.

– ¿Y para los animales de compañía?

– Sí, aunque hay muchos dueños que no se comportan y no recogen los excrementos de sus mascotas. Por eso, le pedimos al Ayuntamiento que envíe de vez en cuando a policías de paisano que pongan freno a estas conductas.

– ¿Qué envidia de otros barrios de Logroño?

– A los barrios jóvenes que tienen más niños. Con los parques que hay aquí, además hay colegio y una guardería, es una pena. Y una línea de autobús que ponga La Estrella, porque nos sobran paradas de autobús pero ninguna línea lleva el nombre del barrio. Todas pasan pero ninguna termina aquí.

Un barrio con límites poco definidos y con un nombre de origen misterioso

Barrio histórico de la capital riojana, La Estrella ha visto cómo sus límites originales se iban desdibujando con el transcurso del tiempo. Sin ánimo de polemizar, los representantes vecinales recuerdan que, inicialmente, la barriada comprendía buena parte del antiguo polígono industrial donde ahora se erige Cascajos. Algo que ya figuraba en el catastro de 1977, defienden los vecinos. Otra cuestión llamativa es la procedencia del nombre con el que se bautizó a esta parte de la ciudad. Nadie se atreve a garantizarlo, pero los rumores apuestan por una antiquísima casa de citas y posada, ubicada en la entrada del barrio y bajo el nombre de La Estrella, como el más probable origen del topónimo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja Residir en el pueblo sin nombre