José Seguí y Fernando Royo, arquitectos del proyecto ganador para la ampliación del Bretón

'Destinados a Entenderse' es el lema de la propuesta que se ha hecho con el primer premio, dotado de 30.000 euros más IVA, decidido por mayoría de entre un total de 35 ideas presentadas al concurso convocado por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que ha abierto este martes el sobre relativo a la «documentación administrativa» y ha permitido saber quién estaba detrás de cada uno de los cinco finalistas (adelantados por Diario LA RIOJA).

El equipo ganador será el encargado de elaborar el proyecto de ejecución y, además, de asumir la dirección facultativa de las futuras obras. El plazo para la redacción del mismo es de seis meses, cuenta con un importe total para este contrato de servicios de 347.536,20 euros, y si todo va según lo previsto, recibido el mismo, se licitaría y se adjudicaría con la previsión de comenzar las obras ya el año que viene.

La propuesta en cuestión, según el acta del jurado, «es respetuosa con la fachada del Teatro y con el Palacio de Justicia». De la misma manera, «se valora la versatilidad de las salas escénicas y el aforo que permiten»; y «la fluidez de los espacios».

«La ubicación del acceso al nuevo teatro, en el extremo opuesto al actual, obliga al uso y disfrute del nuevo vestíbulo por completo. Como punto fuerte se destaca la buena resolución de las conexiones públicas y privadas que permiten atender indistintamente a ambos edificios, simultáneamente o de forma independiente», puede leerse en la valoración oficial.

Del jurado han formado parte, entre otros, María Begoña Fernández Shaw-Zulueta, arquitecta designada por el COAR; Rafael Moneo, arquitecto designado por el Ayuntamiento de Logroño; y Jesús González Menorca, arquitecto representante de la propia Administración local.

«Una fachada moderna que establece un diálogo bastante interesante con la antigua». Así se ha referido a la idea, que ahora tendrá que comprobarse que cumple los requisitos requeridos para formalizar la contratación como tal, el director general de Arquitectura, Iñaqui Carnicero. El alcalde, Pablo Hermoso de Mendoza, ha confiado en que la misma sea realidad «en dos años o dos años y medio».

«Estamos muy satisfechos porque hemos seguido en todo momento un proceso muy escrupuloso para elegir la mejor propuesta que va a servir para que la ciudad de Logroño y el teatro Bretón tenga ese alivio, esa extensión del espacio que va a hacer que se llene de vida. Realmente, ha sido todo un proceso que hemos mimado mucho», han dicho para destacar la idea de «un estudio con gran solvencia y experiencia previa en la realización de teatros»... «el que mejor responde, el que dialoga con la fachada del teatro existente, pero sin renunciar a una fachada contemporánea».

Ahora, según ha informado el propio Carnicero, «vamos a seguir corriendo en las siguientes fases, en la fase de contratación del proyecto, en la fase de licitación, para que el año que viene puedan estar las obras muy avanzadas».

El director general, además de a la fachada, se ha referido a «un vestíbulo que lo dota todo de bastante flexibilidad». Así, ha explicado que este 'hall' «funciona como vestíbulo normal del antiguo teatro, pero también permite independizarlo y poder realizar dos actividades simultáneamente, con una sala que igualmente responde de manera flexible y con una configuración multifuncional, en plano y en graderío, que va a permitir desarrollar diferentes actividades».

El coste del proyecto global está en torno a 2,5 millones de euros, y «si todo marcha según lo previsto, se podrá empezar el año que viene». Para ello, como ha calculado el responsable de Agenda Urbana y Arquitectura, «lo siguiente es contratar el proyecto con el equipo ganador», que elaborará el proyecto definitivo de ejecución en unos seis meses para proceder luego a su revisión, «unos dos o tres meses más».

Será entonces el turno de la licitación de obra, «que suele durar unos tres o cuatro meses», y de la mesa de contratación, «y a partir de ahí se podrá empezar con la obra». Carnicero ha reconocido que «la ejecución tiene su dificultad, porque conlleva una demolición controlada y por fases, y luego tiene una sala con ciertos requerimientos técnicos», pero ha apuntado que, una vez iniciadas las obras, «en un año y medio podría realizarse sin problemas».

Por su parte, el alcalde de Logroño ha apuntado que el Consistorio logroñés asumirá la necesaria demolición de los antiguos juzgados, «que es un proceso que se puede hacer en plazo temporal diferente», contando para ello con un presupuesto que ha cifrado en unos 200.000 a 300.000 euros, y que ha sumado a la total propiedad adquirida del edificio de avenida de Portugal, que permitirá actuar también en el peine y en la Sala de Columnas en una segunda fase. «Entre 2024 o 2025 lo podremos ver», ha finalizado Hermoso de Mendoza.