Una hemeroteca que, para más inri, llegó a sonar en forma de audio con unas declaraciones del propio Escobar negando subidas que finalmente ha habido, concretamente en lo que a basuras se refiere, desde el teléfono móvil de la concejala socialista Esmeralda Campos (para ilustrar aquello de «las ordenanzas de las promesas incumplidas»), que llevó a la presidenta del Pleno a recordar que los reglamentos no permiten «reproducir» archivos sonoros como el que pudo oírse. Pero oírse, se ha oído.
Y un debate, que por otro lado, ha sido el ya escuchado en la previa. Con el concejal del Área de Administración Pública, Interior y Participación Ciudadana, Francisco Iglesias, justificando que «quizás no son las ordenanzas que nos gustarían, pero dada la situación nacional de incertidumbre nos lleva a ser cautos, y por tanto son de transición». Por lo que quiso dejar claro que la tendencia durante el presente mandato será «que el dinero pueda estar en el bolsillo del ciudadano y no en las arcas municipales» (más de un millón de euros el próximo ejercicio).
«Lo que se aprueba es una subida del 9% en la tasa de basuras, una subidad generalizada de los precios públicos y una leve bajada del IBI que apenas beneficiará a las economías familiares», ha sentenciado Campos, del PSOE, un hecho negado, primero por Iglesias, y luego por el concejal de Promoción de la Ciudad y portavoz del PP, Miguel Sáinz. Ambos, una y otra vez, ha hablado de «bajada de impuestos» por mucho que 'duela' a la oposición, incluso el segundo ha adelantado que las tasas serán congeladas en los próximos ejercicios.
Así, tal y como ya estaba dicho, Logroño bajará un 'punto básico' el IBI, incluyendo nuevas bonificaciones en éste y otros a familias numerosas y comercios (amén de otros negocios), pero subirá la basura el 9% y el 2,6% los precios públicos. «Bajando impuestos y solo subiendo las basuras de acuerdo al coste objetivo del servicio y los precios públicos por debajo del IPC real», según la versión popular. «Subida clara», para el resto (excepto Vox).
«El resumen es que suben impuestos, y no es algo con lo que nosotros no estemos de acuerdo, el problema es que en lo que aprueban hoy no hay un ápice de justicia social», ha espetado la concejala de Podemos-IU, Amaia Castro, citando que, por ejemplo, «no tocan vados ni terrazas» y «suben el impuesto de vehículos a una mayoría, la que cuenta con utilitarios, y se lo bajan a unos pocos que disponen de coches de gran cilindrada».
«Me sorprende lo insensible que ha sido el alcalde con determinados temas, como la subida incluso del servicio de ayuda a domicilio (...) Por lo demás, nos baja cinco euros en el IBI, sí, pero nos sube siete en basuras, así que ya me dirán...», ha añadido Rubén Antoñanzas, del PR+.
El PP, que no ha dado su brazo a torcer en ningún momento pese a las reiteradas promesas de Escobar como líder de la oposición, candidato y alcalde, ha defendido que «con hechos, sin retorcerlos ni hacer lecturas parciales, en cuatro meses se han bajado los impuestos más importantes o se han bonificado» y ha pedido «calma porque queda mucho de legislatura para llegar a ese 10% de bajada» (aunque tal porcentaje estaba prometido como inmediato).
No ha habido intervenciones ni del alcalde, Conrado Escobar, ni del exalcalde, Pablo Hermoso de Mendoza... ni tampoco de Vox, quien ha apoyado las ordenanzas fiscales, pero ninguna de sus dos ediles ha tomado la palabra en turno alguno.
Además de las ordenanzas fiscales para 2024, en la parte resolutiva del pleno, se han aprobado dos modificaciones presupuestarias por suplementos de créditos, una por 1,2 millones, para electricidad; y otra, por 321.000 euros, para el aumento salarial del 0,5% de los funcionarios; dos reconocimientos extrajudiciales de créditos para el proyecto de renaturalización del barranco de Yécora y para la gestión de campamentos de verano (de algo más de 7.000 euros y casi 2.000, respectivamente); o una modificación en las liberaciones de concejales del PSOE (el régimen de dedicación parcial de Beatriz Nalda pasa del 75% al 25%, quedándose en 13.191,50 euros, y se fija ese 50% como régimen de dedicación parcial de Luis Alonso, que percibirá 26.383 euros en 14 mensualidades).