Y el PP, tras anunciar la no ejecución del proyecto de reforma de la calle Sagasta y una vez comprobada la reacción de un PSOE ahora en la oposición, pasa al contraataque... desde el gobierno. La portavoz del Ejecutivo local, Celia Sanz, ha ... dado cuenta este miércoles de los fondos europeos pendientes, los cuales analizan estos días para conocer su situación «caso por caso» y donde, ya a su juicio, ha habido «sorpresas».
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Así se ha referido Sanz al hecho de que parte de los mismos se hayan solicitado «al margen de las unidades técnicas de la casa», es decir, con una disfución y descoordinación entre la parte política y funcionarial, «sin conocimiento del interventor y sin que lo supiesen las correspondientes unidades».
La portavoz ha hablado de «captación masiva de fondos europeos» sin control financiero previo (hay que recordar que los mismos no suponen la financiación total de los proyectos para los que se solicitan, sino que pueden llegar a cubrir distintos porcentajes correspondiendo el resto al propio presupuesto municipal) y sin seguir el procedimiento administrativo que «se presupone» (sin la participación de los técnicos en su solicitud y decisiones por resoluciones de Alcaldía y no por acuerdos de Junta de Gobierno Local).
Más que el qué (que también), Sanz ha venido a criticar el cómo (sobre todo). No en vano, ha precisado que desde el Ayuntamiento de Logroño ya se estudian «vías» para no perder la financiación europea y confía en la «benevolencia» del uso de los mismos dadas las dificultades que está habiendo para cumplir con los plazos por parte de todos los ayuntamientos y, sobre todo, «si las revisiones se traducen en cambios que no sean sustanciales».
El nuevo Consistorio ha encargado a las diferentes unidades un informe detallado de cada proyecto con financiación europea para estudiar «rigurosamente» cada uno de ellos y ir dándoles salida («ir dando solución a los problemas», según sus palabras, pues a día de hoy parece que tales fondos, al menos para el nuevo gobierno local, más que soluciones suponen problemas).
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«La buena gestión de un gobierno no se mide en las subvenciones conseguidas; conseguidas, en muchos casos, de espaldas a las verdaderas necesidades de la ciudad y de las demandas ciudadanas. Estudiaremos proyecto a proyecto, aunque los fondos europeos pueden llegar a ser fondos-trampa, y tenemos que evitar que precisamente nos secuestren...», ha reiterado insistiendo en la idea de que cada subvención recibida debe ir acompañada de recursos propios.
«No nos tiene que cegar lo que diga el PSOE, pues se trata de una captación de dudosa legalidad», ha llegado a decir, si bien a preguntas de los periodistas sobre esa «dudosa legalidad», Sanz ha aclarado que se refiere a haberlos solicitado sin tener en cuenta ni al interventor ni a otras unidades municipales como ellos, entienden, debe administrativamente hacerse.
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Todo, pues, se verá. «Lo que no se va a hacer es despilfarrar dinero público, no decimos que se vaya a empezar a devolver dinero a Europa, no vamos a permitir que se pierda o se despilfarre teniendo en cuenta que hay actuaciones que se pueden reconducir, así que vamos a estudiar todas las vías», ha concluido.
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