El polideportivo Titín III reabre sus puertas como centro del dispositivo de temporeros

Estos días, en los que ya se ha podido ver a temporeros en la capital, se han ido utilizando los recursos habituales, los que se mantienen todo el año para quien requiere una cama, tales como el centro de acogida municipal y el albergue de la calle Los Baños, el que se usa para el proyecto Alasca dedicado a personas sin techo.

La campaña parece haberse ido retrasando, tanto aquí como en las regiones en las que estas personas trabajan antes de desplazarse hasta la capital riojana, y de ahí que hasta ahora no se haya dispuesto el grueso de los medios.

La campaña de temporeros, que organiza el Ayuntamiento con ayuda de las entidades que conforman la Mesa de la Pobreza, repite este año el polideportivo Titín III como centro de operaciones y el lugar donde se han dispuesto hasta 150 plazas.

Hace unos días, la Junta de Gobierno local acabó de formalizar los contratos necesarios para esta campaña de vendimia, adjudicando los servicios necesarios para la atención al personal temporero a la empresa Ramón Lázaro Martínez. El Lote I, de atención a temporeros, se encargó por 43.994,50 euros; el II, de manutención, por 54.642,80 euros; el III, de limpieza del polideportivo, por 10.460,45 euros y el IV, de lavandería, por 30.207,65 euros.

Durante la campaña pasada, las 150 plazas dispuestas en el centro deportivo de la calle Serradero, entorno de Pradoviejo, no se llenaron ningún día y su tope estuvo en 138. El año anterior, se alcanzó el «completo» durante cuatro noches. En cualquier caso, si hiciera falta más espacio para alojar a las personas que acudan a la capital a trabajar en la vendimia, se recurriría a los servicios de acogida habituales, es decir, al centro de acogida municipal o al centro del proyecto Alasca, que cuenta con más plazas de las que se utilizan habitualmente.

El servicio que presta la capital, en cualquier caso, es de carácter subsidiario porque la obligación corresponde a quienes contratan, si bien se trata de evitar que se pernocte en sitios sin condiciones.