Omella asegura que los catalanes «son buena gente, pese a lo que sale en televisión»

Omella ha hecho estas manifestaciones en la misa que ha oficiado en en la iglesia de Santiago el Real de Logroño con motivo de la celebración de la Virgen de la Esperanza, patrona de la capital de La Rioja. El arzobispo de Barcelona ha oficiado esta celebración junto a los obispos de Osma-Soria, Abilio Martínez, y el de Calahorra y La Calzada-Logroño, Carlos Escribano.

Omella, durante la homilía, ha recordado que fue obispo de la diócesis riojana durante más de una década, hasta finales de 2015, cuando el Papa Francisco le designó como arzobispo de la Ciudad Condal.

En su homilía, según informa Efe, se ha definido como "un vecino más" de Logroño y ha explicado que muchas personas le han dicho desde que ha llegado hoy a La Rioja que rezan por él y por su trabajo en Cataluña. "Estoy contento allí -Cataluña-, me siendo bien acogido y creo que los catalanes son buena gente, a pesar de que en televisión todos son negros o blancos y, ante eso, no miréis tanto la televisión", ha bromeado. Está al frente, ha explicado, de "una diócesis enorme, en el que hay muchos grupos de personas comprometidas en atender a quienes más los necesitan".

Omella ha hecho un llamamiento a "luchar con ilusión por un futuro mejor", que es "en lo que todos nos podemos unir a la celebración de la Virgen de la Esperanza", ha afirmado. También ha hecho un llamamiento a "trabajar por la paz" porque "es posible vivir en paz y libertad y hay que persistir en ello" porque "todos podemos ser constructores de paz".

Omella ha pronunciado su homilía ante diferentes autoridades regionales y locales, encabezadas por el presidente del Ejecutivo de La Rioja; José Ignacio Ceniceros, y la alcaldesa de Logroño, Concepción Gamarra.

Esta última ha pronunciado una oración-ofrenda, en la que ha pedido a la patrona de Logroño protección para "todos los que cada día sueñan y trabajan para consumar un futuro más próspero", en especial para "quienes atraviesan momentos difíciles, a los que acecha la tentación del desánimo". Ha pedido que la Virgen "guíe" el trabajo para lograr "una inclusión real y efectiva de todos y cada uno de los logroñeses"; y ha reclamado su "inspiración" para que se extienda el mensaje de unidad "ante cualquier intento de fracturar la armonía en nuestra sociedad".