Logroño plantea reducir las terrazas de acuerdo al tamaño de los locales y subir las tasas

La revisión de la ordenanza de terrazas, este mandato sí, parece en marcha. De hecho, a la «consulta pública previa» adelantada por Diario LA RIOJA esta misma semana, le han seguido las explicaciones del propio concejal de Casco Antiguo, entre otras áreas, adelantando los criterios que tratará de introducir el gobierno local para dotarse de una nueva norma que concilie los intereses de hosteleros y vecinos.

Todo ello, eso sí y según las palabras de Íñigo López-Araquistáin, tras dejar claro que las terrazas son una ocupación del espacio público que no supone derecho adquirido alguno, sino una cesión en precario que, por tanto, puede modificarse. De ahí que, de entrada, el planteamiento sea la reducción de superficie, proporcional al tamaño de cada local, además. Limitar la ocupación de terrazas en el espacio público, teniendo en cuenta que el negocio principal es el del establecimiento y que el velador es una ocupación complementaria, vuelve a estar sobre la mesa.

«Los técnicos municipales ya trabajan en el nuevo texto con unos criterios a los que se añadirán otros que se recojan durante la fase de consulta pública previa, además de en las reuniones sectoriales que se mantendrán con todos los implicados», ha recordado el edil, quien se da todo el verano para ello.

La previsión municipal es tener un borrador en torno a octubre, iniciar los trámites para su aprobación inicial en pleno a partir de entonces, lo que podría ser en el último trimestre del año, para su posterior exposición pública y aprobación definitiva en los primeros meses de 2025, «antes en cualquier caso de marzo, fecha de la moratoria con suspensión de licencias actualmente en vigor».

A la reducción de la superficie teniendo en cuenta las dimensiones del local al ser un elemento «complementario» y no principal, se le unirá además una revisión de tasas por la ocupación del suelo (lo que se llevaría a cabo en las ordenanzas fiscales de cara a 2025), pues, según es sabido y tal y como ha puesto de manifiesto López-Araquistáin, «anualmente tan solo recaudamos 300.000 euros». De la misma manera, se contempla la revisión del régimen sancionador.

Por último, dentro de los criterios del gobierno local en este nuevo intento de modificación de la ordenanza, tampoco faltará el de la estética. «Entendemos que al tratarse de una ocupación del espacio público, las terrazas deben mantener cierta homogeneidad», han sido sus palabras.

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